IBILIZ IBILI | Juan Mari Feliú
Vuelta al monte Adi
El monte Adi es una de las referencias más visibles en el perfil del Pirineo navarro. Como el Saioa o Astobiskar es uno de los objetivos más usuales de las excursiones de esta parte de la montaña navarra. Con sus 1.458 metros de altitud, tiene en su regazo norteño los vestigios de la cubeta glaciar más occidental de los Pirineos. El itinerario se inicia en Urepele (414 m.), un pequeño pueblo situado al pie de esta montaña, en la parte más alta del idílico valle de Aldude. Urepele es la cuna del mítico bertsolari Salvador, donde se encuentra un parking y el monumento dedicado a Salvador. La excursión, que debe superar algo más de mil metros de desnivel, parte del frontón por un carretil que pasa junto un rehabilitado molino construido en 1767. Poco después lo abandonamos por otro situado a la izquierda para ganar altura entre prados y campos de labor salpicado por algunos caseríos como el de Jokaluzea. Aquí veremos un poste indicador de los senderos Elizmendi y de Xalbador.
Tras dejar una borda, el itinerario bordea la cumbre de Mutikoenea y una torreta de comunicación. Una vez abandonado el carretil se inicia una constante subida por un amplio camino que nos situará en las herbosas lomas de Patarromonho (878 m.) después de pasar cerca de dos bordas en ruinas. Arriba pasaremos junto a campos de cercados de muros de piedra y las bordas Xalbador y Zurgiña. Por la derecha alcanzaremos el collado Korrota (848 m.), hasta donde llega el carretil de Urepele. Una vez en la borda Biperra la pendiente se agudiza, dejaremos al paso un bosquete de hayas y poco después estaremos en la picuda cumbre de Isterbegi (1.027 m.). Amplia y herbosa, la cumbre está coronada por el mojón nº 141. Bonita vista del valle de Aldude con sus pueblos y dispersos caseríos en miniatura. Continuaremos bajando por la vertiente contraria hasta el collado (856 m.), donde dejaremos a la izquierda una txabola pastoril. El siguiente tramo es para alcanzar la loma de la divisoria de aguas por zona bastante abierta hasta salir al portillo que da acceso a una pista proveniente de Urkiaga. Con seguir ganando altura por ella, y pasar más arriba de la pista a una senda bien definida, saldremos de improviso, por un portillo del hayedo a los prados cimeros del Adi. Con seguir junto la alambrada y tras superar un fuerte repecho estaremos en los 1.458 m. de una de las cumbres más emblemáticas de Nafarroa. Un vértice de segundo orden y varios buzones dan fe de la extraordinaria panorámica que ofrece esta cumbre.
Desde la cima de Adi, el descenso lo haremos por el lado contrario, cercanos a la alambrada hasta desembocar en el lomo que se desplaza hacia el Este hasta la cumbre de Iturrunburu. En el portillo de Aratun abandonamos la alambrada que establece la línea divisoria de aguas (1.213 m.). Tras pasar un bosquete de tejos, la senda culebrea por la fuerte pendiente entre brezos y hayas hasta situarnos junto la regata de Odia, lugar donde se estabiliza. Un amplio camino nos llevará por la umbría del barranco cubierto de un denso hayedo hasta desembocar en el carretil de Sorogain que une Bizkarreta y Mezkiritz con Urepele.
Salvada la regata que realiza numerosos meandros entre un paisaje de eterno verde iremos subiendo hasta la cabecera de este idílico vallecito hasta el amplio collado de Aztakarri (960 m.). Antes habremos dejado junto el carretil el fenomenal crómlech Santxoten harria. A la derecha del collado queda cercano el dolmen de Beodoi. Desde el collado la vista se abre hacia el valle de Aldude y las cimas que lo encierra, con el Auza como cumbre señera en el horizonte. Panel informativo del sendero GR 12 (Sendero de Euskal Herria). Acometeremos la bajada hacia Urepele al principio el carretil que abandonaremos más abajo a la altura de una mesa panorámica del valle. Después de consultar los detalles, por la izquierda iremos bajando por los flancos herbosos de Beodoi, dejamos una borda en el camino al tiempo que atravesaremos la invisible frontera a la altura de la muga 148.
Una vez situados junto a dos pequeñas casas, hasta donde llega un ramal del carretil, continuaremos por el perfil de la loma, combinando prados y hayedos. Dejaremos el caserío Mandabidea, pasando de éste a otros caseríos escalonados, entre prados cercados por muros hasta desembocar en el carretil de Sorogain, en el fondo del barranco, a la altura del caserío Lassaenea, situado al otro lado de la regata. Tan sólo nos restará alcanzar el visible caserío Erlanjoenea, en un cruce de carretiles. Siguiendo por el carretil de la izquierda y tras cruzar los caseríos de Gainekokarrika auzoa estaremos de nuevo ante el frontón de Urepele.