La concentración que se desarrolló ayer en Bilbo, con la presencia de dos cabezas de un vehículo pesado, se trasladará el próximo lunes a la patronal navarra, CEN. En Bilbo, Estitxu Ugarte y Esteban Muruamendiaraz, del sindicato de transportistas autónomos de Euskal Herria, Hiru, entregaron en las oficinas de Confebask un breve escrito en el que indican que ante la grave situación por la que atraviesan debido a la crisis económica y a la espectacular subida de los precios del petróleo «nos movilizamos para reclamar la puesta en marcha de medidas para reconducir la catastrófica situación del sector».

En el documento entregado, el sindicato reclama la puesta en marcha de una factura específica para el sector del transporte de mercancías por carretera, de manera que un tercio de la misma se adecúe «trimestral y automáticamente dependiendo de la variación del precio del gasóleo». Esa fórmula, según dieron a conocer a la patronal vasca Confebask, es «similar a la denominada cláusula de revisión de precios por el incremento del precio del carburante, que fue acordada en junio de 2008 en Madrid por parte del Gobierno español, los cargadores y la patronal del sector del transporte». En este sentido, Hiru se dirigió a la organización patronal «porque sus asociados son los que originan la gran mayoría de las cargas que los transportistas trasladamos y son, por tanto, cargadores y receptores de las facturas que emitimos». Por lo que añadieron que «para poder realizar nuestra actividad en condiciones dignas y con las mínimas garantías de calidad y seguridad de servicio, les trasladamos nuestra reclamación para que procedan a su difusión entre sus asociados y tomen las medidas oportunas para que se pongan en marcha».

Los transportistas autónomos generan en Hego Euskal Herria el 7% del PIB, de la riqueza. En tres años casi 4.000 transportistas se han visto obligados a dejar la actividad debido a la crisis económica. Hiru reclamó en la Gran Vía de Bilbo la factura específica, pero dejó claro que la crisis económica está repercutiendo de forma directa en el transportista, al que el coste elevado del carburante «le asfixia. No puede ser que estemos pendientes siempre de unos especuladores que suben y bajan el precio del petróleo a merced de determinados acontecimientos», expresaron ante la sede de Confebask.

Por otro lado, la Federación Española de Transporte Discreccional de Mercancías (Fetransa) anunció ayer que 130.000 transportistas autónomos han decidido realizar «movilizaciones a partir del próximo 15 de abril si las empresas cargadoras no cumplen los pactos establecidos sobre costes y la Administración no impone el cumplimiento de estos acuerdos». Según comunicaron ayer, si no hay acuerdo habrá paros en torno a las fechas de la Semana Santa. Hasta ahora, las negociaciones con ambas partes no han dado ningún fruto.