Torturados convocan una marcha para exigir el fin de esta práctica
GARA | IRUÑEA
Un grupo de personas que han padecido la tortura tras ser detenidas -«Somos tan sólo una pequeña representación de las 10.000 personas que han sufrido torturas en Euskal Herria en las últimas décadas»- comparecieron ayer en Iruñea para hacer un llamamiento a participar en la manifestación que han convocado para el próximo domingo, a las 12.00, desde la Estación de Autobuses de la capital navarra.
La marcha pasará frente al cuartel de la Guardia Civil y a la sede de la Delegación del Gobierno español «para exigirles que dejen de torturar a la gente, que dejen de reprimir a este pueblo, que abandonen las armas y que se atrevan a confrontar democráticamente con el independentismo vasco, sin torturas, sin detenciones, sin violencia, sin amenazas, sin imposiciones».
Los convocantes reclamaron el fin de la incomunicación durante el periodo de detención, tal y como recomienda Torturaren Aurkako Taldea (TAT) para acabar con esta práctica, y aplaudieron que se organicen iniciativas como el Foro Cívico contra la Tortura Estaban Muruetagoiena, impulsado por distintos agentes políticos, sindicales y sociales y que se reunirá en los cines Golem el viernes y el sábado.
Ayer, también en Iruñea, la Policía española impidió a madres y padres de torturados concentrarse ante la sede del PSN, aunque cumplían el requisito de formar grupos inferiores a veinte personas. La Delegación del Gobierno español se negó a autorizar la movilización alegando que no era de «carácter urgente». Los agentes también impidieron a los reporteros gráficos y a las cámaras de televisión tomar imágenes de la protesta.