Azkuna opta por un prestigioso letrado para defender a policías acusados de detención ilegal
Iñaki Azkuna no confía en los letrados del Consistorio bilbaino para defender a los policías municipales acusados de la detención ilegal de dos mujeres. Por ello, ha contratado los servicios de un prestigioso abogado.
Agustín GOIKOETXEA | BILBO
La Audiencia de Bizkaia ordenó recientemente al titular del Juzgado de Instrucción número 7 de Bilbo que vuelva a investigar la denuncia de dos mujeres que fueron testigos de una actuación de la Policía Municipal de Bilbo y a quienes se arrestó, lo que las afectadas consideran como detención ilegal. Este caso fue denunciado por diferentes organismos sociales, que ya advirtieron de que el Ayuntamiento, en lugar de depurar responsabilidades en el seno de la guardia urbana, proseguiría con la batalla en los tribunales.
Con ese objetivo, el equipo de Iñaki Azkuna ha contratado los servicios de un prestigioso abogado, Javier Beramendi, vinculado en los últimos años a casos de gran transcendencia en la opinión pública, como los que recientemente sentaron en el banquillo al ex director de Inspección de la Hacienda vizcaina, Juan Ramón Ibarra, y al ex director financiero del Museo Guggenheim, Roberto Cearsolo.
Según se desprende de esa decisión, los responsables municipales no confían en los servicios jurídicos del Ayuntamiento y ponen la defensa de los cuatro agentes en manos de Beramendi, lo que lleva aparejado el abono a cargo de las arcas públicas de su minuta, que fuentes del propio Consistorio estiman elevada.
Beramendi, apuntan desde el movimiento asociativo, está relacionado con procesos por supuesta corrupción de personas vinculadas al PNV de los últimos años u otros del pasado, como el «caso Azpiegitura». Y citan su relación de parentesco con altos cargos jeltzales, ya que es cuñado del diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao.
En la sentencia de la Audiencia de Bizkaia, del 25 de enero, se ordenó «la reapertura del caso por considerar que hay indicios de que se ha podido cometer un delito de detención ilegal». La Sala consideró que calificar como delito de desobediencia grave la actitud de las dos mujeres -que se limitaron a observar el cacheo de un joven inmigrante- «parece absolutamente exagerado y, más bien, se configura como un pretexto para detener a las recurrentes».
Una veintena de colectivos celebrarán el sábado en Gasteiz el Día Internacional contra el Racismo y la Xenofobia, impulsando por segundo año consecutivo una movilización abierta y unitaria que partirá, a las 17.00, desde la plaza de la Virgen Blanca.
En la convocatoria de 2010, tal y como rememoran, más de 500 personas de diversos orígenes y más de 40 colectivos de personas migrantes y de la sociedad vasca marcharon entre el centro de internamiento de Hendaia y la comisaría de Irun para denunciar las prácticas racistas y xenófobas en Europa. En esta ocasión, en Gasteiz, criticarán la agresión e invasión militar al pueblo libio bajo la autorización de la OTAN y la UE.
Por otro lado, más de un millar de personas, según el Departamento de Empleo y Asuntos Sociales del Ejecutivo de Lakua, participaron el lunes pasado en los «flashmob solidarios» contra el racismo organizados con motivo de la conmemoración de la jornada internacional. Los escenarios elegidos para la grabación de los «flashmob» fueron los puntos más emblemáticos de Bilbo, Donostia y Gasteiz, y otras localidades como Getxo, Tolosa, Eibar e Irun. GARA