«Prudente satisfacción» en Ipar Kutxa por sus resultados de 2010
Con un incremento de los beneficios del 2,8% respecto a 2009, Ipar Kutxa afronta con moderado optimismo el convulso presente y futuro en el que navegan las entidades financieras. El director general de la entidad, Carlos Osés, defendió ante la Asamblea general celebrada ayer en el Palacio Euskalduna de Bilbo la validez de su modelo de negocio, con una sólida posición de solvencia sustentada en una buena gestión del proceso de concesión de riesgos.GARA |
El director general de Ipar Kutxa, Carlos Osés, expresó ayer su «prudente satisfacción« por los resultados obtenidos por la entidad en 2010, recalcando el favorable diferencial obtenido con la media de las cajas de ahorros y del sector financiero en general.
Osés adelantó el mantenimiento de una política de «prudente gestión y crecimiento estable» para los próximos tres años, sin descartar las oportunidades que puedan presentarse de formalizar alianzas con otras entidades.
El máximo responsable de Ipar Kutxa realizó estas manifestaciones en su informe de gestión ante la Asamblea General de la caja, que tuvo lugar en el Palacio Euskalduna de Bilbo. Los socios de la cooperativa de crédito aprobaron las cuentas anuales y la gestión de la caja y de su grupo consolidado en el pasado ejercicio, junto al resto de los puntos propuestos en el orden del día.
En su alocución, el director general de la caja destacó el crecimiento de la actividad bancaria en un 3,7%, tanto en créditos (+2,3%) como en recursos acreedores (+5,2%), en «un año difícil por la irracional competencia derivada de la extrema necesidad de liquidez de algunas entidades».
También subrayó el incremento en un 15% de los créditos a empresas, y un balance final en el que los beneficios crecieron un 2,8%.
Reflexión Ikuspen 2013
El responsable de la cooperativa de crédito expuso ante los socios los resultados de la reflexión estratégica Ikuspen 2013, en la que se destaca una posición sólida de solvencia sustentada en una buena gestión del proceso de concesión de riesgos, con bajos ratios de morosidad y una confortable posición de liquidez. La estructura financiera de la entidad se presenta equilibrada, sin una dependencia de los mercados mayoristas para la financiación del negocio recurrente.
Carlos Osés explicó que, en un clima global de recuperación, los principales retos de las entidades financieras van a ser la solvencia, la liquidez y la eficiencia, y que Ipar Kutxa deberá centrar sus esfuerzos en ésta última, dadas sus favorables posiciones en los dos primeros aspectos.
Ikuspen 2013 ha fijado cinco metas financieras en el próximo trienio: reducir la dependencia de la financiación mayorista; reconducir la eficiencia de la caja hasta el 51,7%; contener morosidad y ampliar diferencial con la media del sector -con una cobertura del 100%-; contener los gastos y mejorar el ROA a niveles del 0,6%; y mejorar la solvencia para afrontar situaciones de estrés.
Para el máximo responsable de Ipar Kutxa, la entidad ha conseguido reafirmar la validez de su modelo de negocio y está en disposición de afrontar con éxito estos retos, dada su favorable comparativa con el conjunto del sector.
Riesgo bajo
En este sentido, destacó una exposición al riesgo del sector inmobiliario muy por debajo de la media. La valoración media del riesgo conjunto en Ipar Kutxa es bajo, del 1,41%, similar al de 2009, lo que confirma una posición sólida y saneada. Y junto a los favorables datos cuantitativos, Osés valoró también aspectos cualitativos como la calidad del servicio y la satisfacción de la clientela.
Refiriéndose al entorno general del sector financiero, Osés señaló que «no podemos permanecer al margen de la realidad del actual proceso de reestructuración y saneamiento del sistema. Afortunadamente, debido a nuestra fortaleza financiera podemos avanzar sin prisa, pero debemos hacerlo sin pausa, en el camino de seguir sondeando y buscando activamente operaciones de alianzas».
En el ejercicio 2010, los beneficios crecieron en un 2,8% respecto al año anterior. Un dato que contrasta con la media del sector financiero en el Estado español, donde se produjo un decrecimiento del 23%.
Ipar Kutxa, en vista de la reestructuración del sistema financiero, no descarta la búsqueda de nuevas alianzas. No obstante, su «fortaleza financiera» le permite afrontar ese objetivo «sin prisas».
El consejo de administración de Banca Cívica ha aprobado el traspaso del negocio bancario de Caja Navarra, Cajasol, Caja Burgos y Caja Canarias al Banco, con la salvedad de aquellos activos y pasivos que están adscritos a la obra social y de las acciones de las cuatro entidades que conforman el grupo.
Este es un paso muy importante y decisivo en el proceso de conformación de la entidad bancaria. Con este proyecto de segregación, Banca Cívica pasará a ser el tenedor de todos y cada uno de los activos y pasivos de las entidades del grupo, es decir, el negocio financiero y todos sus recursos humanos, técnicos y administrativos. A partir de este momento, las cajas del grupo convocarán a sus respectivos consejos de administración y a sus respectivas asambleas, que deberán ratificar estos acuerdos.
A este grupo se podría sumar un nuevo miembro. Unnim -la fusión de Caixa Sabadell, Caixa Terrassa y Caixa Manlleu-, busca un socio que le ayude a recapitalizarse. Banca Cívica o la entente BBK-Kutxa-Vital son algunas de las alternativas que maneja para no tener que recurrir a la ayuda pública. GARA