La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco rechazó el recurso de suplicación de Construcciones y Auxiliar de Ferrocarriles (CAF) por lo que tendrá que pagar 164.223,38 euros y el interés legal a la viuda de José Francisco Lasa, ex trabajador que falleció en octubre de 2009 a consecuencia de un mesotelioma pleural, un tipo de cáncer que se produce al haber inhalado fibras de amianto. La sentencia culpa a la empresa porque «antes de que Lasa falleciera existía suficiente normativa referida a la prevención de enfermedades derivadas de la presencia de polvo de amianto en el ambiente de trabajo y la obligación empresarial de adoptar las medidas indicadas», pero CAF no actuó en el sentido de prevenir la salud del trabajador.

Otra sentencia, por otro lado, del Juzgado de Lo Social número 3 de Donostia impone un recargo del 30% en las prestaciones sociales a la Seguridad Social derivadas por la enfermedad profesional del ex trabajador Ignacio Iturrioz Aizpurua, lo que permitirá a su viuda mejorar su pensión. Este soldador se dedicó al montaje de vagones tanto en el taller como en el interior de los vagones que iban forrados o tejidos de amianto. En agosto de 2007 falleció a consecuencia de un mesotelioma pleural. Como refleja el fallo judicial, en la vista judicial quedó ratificado que CAF no puso medio alguno para la extracción ni la manipulación de amianto.

Una tercera sentencia del Juzgado de Lo Social número 5 de Donostia impone un 50% en el recargo de prestaciones sociales a las empresas CIE Legazpia, Corporación Patricio Echeverría y Bellota Herramientas, por la enfermedad profesional que contrajo Rafael Alustiza. Fue un mesotelioma por el amianto, lo que le llevó a la muerte, ya que trabajaba con ese mineral.