Leopard, el nombre del nuevo equipo de los Schleck, no es ninguna firma comercial ni anuncia nada. De hecho, en el maillot y en los vehículos del equipo el hueco principal está vacío a la espera de encontrar un primer sponsor que figure junto a la marca de bicicletas Trek y aporte una parte importante de los alrededor de quince millones de euros de presupuesto anual de un equipo que antes de nacer ya era el primero del ranking deportivo de la UCI. Mientras tanto, el millonario Flavio Becca asume la mayor parte del coste de un proyecto basado en crear un gran equipo en el Ducado alrededor de los hermanos Schleck, a los que el magnate luxemburgués conoce desde que eran niños. Y hasta encontrar un sponsor el equipo se llamará Leopard -Leopardo en inglés- y su imagen es la de ese animal. Como explica Frank Schleck en la entrevista de los dos hermanos a GARA, «es un nombre que le gustó al gran jefe, porque es un animal rápido, agresivo, es la forma de correr que quiere para su equipo».

Así de agresivo se comportó el Leopard en la primera etapa: «Hicimos toda la carrera adelante para lograr un buen resultado y nos dejamos demasiadas fuerzas y tampoco teníamos las mejores piernas. Perdimos 18 segundos y decidimos que no íbamos a llevar más la responsabilidad. El maillot lo tiene otro equipo y son otros los que deben tomar la carrera en mano. Vamos a intentar recuperar los segundos perdidos y hacer una buena carrera, pero ahora son otros los que deben trabajar como lo hicimos en Zumarraga», explica el mayor de los Schleck.

Ese día dio la sensación de que su equipo da mucha importancia a la prueba vasca: «Es importante hacer ver que Leopard Trek está en forma y que es un equipo que trabaja bien en cabeza. Luego Andy y yo no tuvimos el mejor día y nos dejamos muchas fuerzas por ir adelante, pero es bueno ver que el equipo está ahí, unido, que trabaja como bloque, motivado al 100%. Aunque no gane, eso demuestra que los compañeros están ahí para ayudarte. Ni Andy ni yo estamos contentos porque queríamos hacer más, pero es bonito ver que tus compañeros vienen a animarte y te dicen que no pasa nada, que mañana lo haremos mejor».

Hoy es el día en el que mejor lo quieren hacer los dos en la subida a Arrate, donde Frank Schleck espera encontrar las piernas que le llevaron a ganar con autoridad en el final en alto del Criterium Internacional: «La subida a Arrate nos va mejor a nuestras características. Al final en rampas como las de La Antigua sabemos que hay corredores como Joaquim Rodríguez o Samuel Sánchez que están más fuertes. Es una especialidad suya. Debíamos estar adelante, pero no era nuestro día y ellos son más explosivos».

«Voy a intentarlo»

También Andy Schleck tiene marcada con una cruz la etapa de hoy. Ya lo intentó el año pasado sin que las piernas le respondieran como quería y adelanta en su entrevista a GARA que «voy a intentarlo en Arrate. Es la última preparación para las clásicas, me siento bien y voy a hacer todo para ganar una etapa y para hacer una buena general y luego ir con la moral alta a disputar las tres clásicas -Amstel, Flecha y Lieja-. En las tres vamos a buscar la victoria y veremos si podemos ganar por lo menos alguna de ellas».

El segundo del último Tour, y posible ganador oficial si se descalifica a Alberto Contador por el positivo de clembuterol, quiere disipar las dudas que le dejó no poder aguantar en La Antigua el ritmo de los mejores: «En esa subida no estaba bien, no me he visto como quería, pero mi forma está mejor que antes y no me veo mal para llegar a la parte más importante de la primera parte de la temporada, las clásicas ardenesas».

El Leopard Trek se ha tomado la Euskal Herriko Itzulia como una puesta a punto para esas citas. Por eso saca una conclusión positiva de la primera etapa porque «todo el equipo estuvo bien. Es el equipo de las clásicas, lo tomamos como un test y se vio que todos van bien. Al final no sé qué nos pasó, pienso que había demasiado viento. No sé por qué, pero a veces hay días en los que no vas como quieres y fue un día de esos. Frank tampoco se sentía bien y perdimos algunos segundos, pero tampoco demasiados. La subida era un kilómetro con mucha pendiente y cuando encaramos la montaña no me sentía muy bien y no quise explotar. Además veía que los demás estaban a unos pocos metros. Lo que sucede es que con esa pendiente pocos metros son diez segundos».

Tras ver el desarrollo de las primeras etapas, el menor de los Schleck comparte el pronóstico generalizado que apunta al líder de Euskaltel Euskadi: «Pienso que Samuel Sánchez es el favorito, está más fuerte que Horner y Gesink». La subida a Arrate será la que deje todas las cartas boca arriba y en esa ascensión será importante la rapidez y agresividad de los leopardos luxemburgueses.Joseba ITURRIA