Acorralado, el régimen yemení de Saleh se aferra al poder a tiros
La represión contra las protestas ha indignado a la oposición yemení, que dio ayer un paso más con marchas hacia los edificios públicos en las principales ciudades del país. El régimen respondió al desafío con fuego real, tanto en la capital, Sana´a, como en Taez, la segunda ciudad del país y en Aden, capital de Yemen del Sur, paralizado ayer por una huelga general.
GARA
Las Fuerzas de Seguridad del régimen yemení abrieron fuego contra una manifestación de miles de opositores que intentaba llegar a la sede de la Presidencia del país en la capital, Sana´a. El saldo provisional habla- ba de un muerto y decenas de heridos. Horas antes, al menos dos manifestantes murieron y medio centenar resultaron heridos por disparos de la Policía en Taez, segunda gran ciudad yemení .
Militares y fuerzas de choque leales al régimen abrieron fuego contra los manifestantes cuando se hallaban a escasos 200 metros de la residencia oficial del presidente, Ali Abdullah saleh. Testigos aseguraron que los manifestantes fueron atacados por francotiradores apostados en las azoteas de las casas.
La marcha al palacio presidencial era la respuesta a la brutal represión del régimen contra las manifestaciones en Taez, 200 kilómetros al sur de Sana'a. Y es que las Fuerzas de Seguridad dispararon a primera hora de la mañana a los concentrados en la principal avenida de la ciudad, dejando un saldo de dos muertos; siete desde el domingo.
Indignados por este asalto, miles de ciudadanos bajaron a las calles en dirección a los edificios oficiales de la ciudad. Los manifestantes tomaron al asalto la sede de la compañía estatal de petróleo y pusieron en la entrada un cartel que rezaba «Cerrado por decisión del pueblo».
Huelga general en el sur
En el sur independentista, el seguimiento de la huelga general convocada para ayer era masivo.
En la capital, Aden, los soldados del régimen abrieron fuego contra la multitud, que bloqueaba los accesos a la ciudad con la ayuda de bloques de cemento. Al menos dos manifeastantes resultaron heridos.
Los comercios permanecieron cerrados todo el día en la ciudad portuaria y testigos aseguraban que a última hora se seguían escuchando disparos de forma intermitente.
La huelga general tuvo, asimismo, un gran seguimiento en la provincia vecina de Lahej.
Siguiendo en el sur, en Ibb la protesta tomó la sede del gobernador del régimen y emularon a sus hermanos de Taez pintando la fachada con el lema «Cerrado por decisión popular»
Todo apunta a que la oposición ha decidido dar un paso adelante en sus protestas habida cuenta de que el presidente Saleh y su régimen siguen dispuestos a aferrarse al poder. Un régimen que parece haber decidido responder con un incremento de la represión (se han contabilizado 160 muertos). Todo ello en medio del silencio total de Occidente y cuando la mediación de las cleptocracias del Golfo sigue sin desbloquear la situación.
Sectores del régimen y de la oposición tolerada accedieron a la salida de Saleh con garantías de impunidad. El presidente ha dado marcha atrás y el pueblo insiste en que debe dejar el poder sin condiciones.
La Fuerza Aérea yemení bombardeó el martes varias zonas rurales opositoras. Los aviones atacaron un área al norte de la capital, Sana´a, donde decenas de miles de manifestantes han protestado todos los días para exigir la renuncia de Saleh. Al menos cuatro personas resultaron heridas.
Vecinos de las regiones bombardeadas aseguraron a Reuters que la Guardia Republicana, liderada por el hijo de Saleh, pasó por la localidad turística de Hadramout, situada en el sur de Yemen, donde varias unidades del Ejército han desertado.
No establa claro el objetivo de la Guardia Republicana, aunque testigos aseguraron temer que se prepare un asalto definitivo contra esta ciudad, escenario de protestas contra el régimen. GARA