Apenas lleva 15 meses como profesional y parece ya todo un veterano. Apenas había disputado un par de partidos mano a mano en toda la cancha y ya está en semifinales del campeonato de primera. Soñaba con ser como Rubén Beloki y terminó la carrera de uno de los mejores especialistas de la distancia dejándolo en cuatro como si nada... Sin duda, la de Mikel Idoate es una de las irrupciones más fulgurantes, pero sobre todo de las más naturales de un pelotari en la élite de los últimos tiempos. Y es que, el de la Txantrea afronta el reto de una semifinal del Manomanista con un saber estar impropio de un joven de 21 años y prácticamente con la misma sencillez con la que, en el primer entrenamiento antes de jugar la primera previa ante Pascual, le dijo a Jokin Etxaniz que «no valgo para esto».

No obstante, a pesar de que haya sido una gran revelación para el gran público, a Xala, su rival este sábado, no le ha pillado de sorpresa la eclosión de Idoate en este manomanista. «Ya sabíamos que jugaba mucho, se veía desde el principio. Con el juego que ha hecho y cómo acaba los tantos no me sorprende mucho que haya llegado hasta aquí. En el cuatro y medio ya se vio que jugaba muchísimo y que físicamente está muy fuerte. Habrá que contar con él. Ha ganado cinco partidos y está con mucha confianza, es un pelotari muy físico que tiene dos manos muy buenas, para su edad es muy completo, muy frío y sabe acabar los tantos. Será un partido duro», señaló el de Lekuine, que ha compartido entrenamientos con Idoate en el grupo de Tolosa.

Cansancio mental

Pero al margen de un físico privilegiado, este estudiante de derecho también posee una gran claridad de ideas, indispensable para asumir una eclosión tan súbita. Así, tras una sucesión de partidos vertiginosos, Idoate desveló que ha aprovechado estos 15 días sin competición para descansar físicamente, pero sobre todo, mentalmente.

«Mucha gente dice que que es mi primer campeonato y que no tengo esa presión que hubiera tenido en otros, pero yo mismo me he metido presión. Me he ido viendo a un pasito de dar un gran salto, quería aprovecharlo y he tenido la suerte de seguir ganando. Es el momento de disfrutar, voy a salir sin presión y, si gano, sería ya el no va a más», explicó.

En los cinco partidos disputados, el enfrentamiento ante Gonzalez fue, sin duda, un punto de inflexión para Idoate. Xala lo tiene muy en cuenta, porque para ganar a su paisano «hay que hacer un gran trabajo, porque Sebas siempre está muy bien físicamente».

Sin embargo, Idoate entiende que, «ese partido me dio confianza y fue importante pero no sirve como guía para éste. Ambos son zurdos, pero son muy diferentes. Gonzalez basa su juego más en la fuerza y Xala quizá es más artista», declaró el txantreano.