El comité de empresa de la planta de Asea Brown Boveri (ABB) en Trapagaran (Bizkaia) ha convocado para el próximo martes su «primera» jornada de huelga contra el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que pretende dejar en la calle, según indica la empresa, a casi un centenar de trabajadores

En conferencia de prensa en Bilbo, representantes del comité de empresa de la planta, integrado por ESK, CCOO, UGT y ELA, anunciaron movilizaciones y criticaron que la dirección de la multinacional ha difundido unas cifras de afectados por el ERE menores de las que realmente son.

La multinacional, dedicada a las tecnologías eléctricas y de automatización, anunció el pasado miércoles que va a reestructurar su división "Power Products" en el Estado español, lo que conllevará un ERE para prescindir de 147 empleados en seis centros de trabajo (Zaragoza, Córdoba, Gavá, Sant Quirze del Vallés y Trapagaran).

Según aseguró el presidente del comité, Javier Mentxaka, el ERE anunciado afecta realmente a 241 trabajadores en el conjunto del Estado español, de los cuáles 160 -la totalidad de la línea de producción de transformadores- pertenecen a la planta vizcaina.

Mentxaka explicó que la empresa ha mostrado su intención de recolocar posteriormente a los 61 trabajadores de diferencia, de ahí que no los contabilizase a la hora de anunciar el ERE. La mayoría de las rescisiones de contratos serían «traumáticas» por medio de despidos y afectarían fundamentalmente a gente joven, según el comité.

La representación sindical advirtió que «no va a admitir la liquidación» de la línea de producción de transformadores y que va a pelear «con uñas y dientes» en contra de las intenciones de la empresa que, a su juicio, pretende dar «un paso más en el proceso de desmantelamiento» de la factoría con el fin de «hacer un cierre».

Los sindicatos denunciaron que la dirección planea «deslocalizar» una planta que «ha estado saneada», con «más de 30 millones de euros de beneficios» en los últimos años, y llevar una parte de la producción a Turquía y otra a Italia, «unas zonas de bajo coste».

Mentxaka denunció que la dirección ha «metido» en el ERE a trabajadores de otras zonas geográficas con el fin de «no tener que negociar en Euskadi» el expediente y hacerlo en Madrid, donde «no va a sentir la presión» de los trabajadores vizcainos. Sin embargo, aseguró que pelearán para que se negocie en Bizkaia, ya que la de Trapagaran es la planta más afectada. «Las negociaciones se llevarán en Bizkaia, quieran o no quieran».