Tras el 22-M
Bildu y PSE no cierran la puerta a acuerdos en materia fiscal y social
Aunque existen desencuentros programáticos insalvables para un pacto de investidura, ambas formaciones consideran factible poder llegar a consensos puntuales en el ámbito fiscal y social durante la legislatura.
O. LARRETXEA - I. IRIONDO | DONOSTIA
Bildu sigue adelante con su ronda de conversaciones para garantizar la gobernabilidad de Gipuzkoa. Ayer recibió a una delegación del PSE encabezada por Miguel Buen. Durante el encuentro, ambas partes constataron la existencia de diferencias programáticas insalvables para alcanzar un pacto, pero podrían ser posibles acuerdos puntuales.
A la salida de la reunión, Miguel Buen destacó los desacuerdos en materia de infraestructuras. Afirmó que Bildu le había entregado su programa, que en una primera lectura calificó de «voluntarista» y «un tanto utópico». Aunque descartó un pacto de investidura, dejó abierta la puerta a otros acuerdos. Preguntado sobre esta posibilidad, respondió con un «¿Por qué no? En temas sociales e, incluso si se acepta la discusión, en materia fiscal a nivel de Euskadi. El lehendakari -recordó- hizo un llamamiento para un acuerdo fiscal a nivel de Euskadi; el PNV en aquel momento no respondió; ellos [por Bildu] se han mostrado favorables, incluso proclives a trabajarlo».
También Bildu, en una nota de prensa, destacó que quedan abiertas las puertas para llegar a acuerdos puntuales a lo largo de la legislatura en materias en las que pudiera haber coincidencia, como la fiscalidad y las políticas sociales.
Normalización
Además, la coalición abertzale hizo público que la delegación del PSOE mostró «un especial interés en el proceso normalización de Euskal Herria».
El candidato de Bildu a diputado general, Martín Garitano subrayó en este apartado que «el PSE es determinante en este nuevo tiempo político y tiene que tener un papel importante en el mismo». Por ello, se comprometió a mantener abiertos los cauces de comunicación y colaboración necesarios para avanzar hacia el objetivo común de alcanzar la paz y la normalización política del país.
Diputado general
En cuanto a la elección del diputado general, Bildu propuso al PSE que no presentara candidato para «no obstaculizar la voluntad de cambio mostrada por la ciudadanía guipuzcoana».
Buen rehusó esta posibilidad y, ya en sus declaraciones ante los medios, aclaró que el PSE presentará su candidatura y, si no hay un acuerdo global con el PNV, se votarán a sí mismos. Dejó en manos de los jeltzales la «responsabilidad» de que Bildu se haga con la Diputación. Y rechazó la opción de votar al PNV si no hay un pacto que alcance a los ayuntamientos.
Por su parte, el candidato del PNV, Markel Olano, dejó abierta la posibilidad de presentarse a la investidura en función de cómo se desarrollen las conversaciones entre formaciones políticas durante junio.
Gasco quiere pactar con el PNV
Bildu y PSE también mantuvieron ayer una reunión sobre la Alcaldía de Donostia. Juan Karlos Izagirre expuso a Ernesto Gasco los ejes principales de su programa y le entregó un ejemplar del mismo. Quien fuera el número diez de la lista del PSE -no resultó electo-, y ahora es su candidato a alcalde, señaló a la salida del encuentro que «lo lógico» sería lograr un acuerdo con el PNV, dado que ambos tienen «los programas más coincidentes» y con Bildu no coinciden «en nada» fundamental.
UPyD, que el 22-M sumó 10.846 votos, afirmó ayer que en estos momentos «lo prioritario es que Bildu no gobierne allí donde se pueda evitar» porque, según dijo, se trata de que a la sociedad vasca «no se la vuelva a humillar».
El vicecoordinador de Aralar, Jon Abril, afirmó ayer que aún no han decidido el sentido de su voto en Gipuzkoa. Explicó que están a la espera de hablar con las restantes formaciones con representación en Juntas y adelantó que su actitud será «abierta y dialogante», pero que no dará «un cheque en blanco a nadie», aunque tampoco se «obstaculizará a nadie». Una delegación de Aralar se reunirá hoy con Bildu. Teniendo en cuenta que la coalición es la fuerza más votada, Abril señaló que «se puede llegar a determinados acuerdos, sobre todo programáticos», en cuyo caso Aralar «va a intentar poner sobre la mesa que la apuesta por la paz sea definitiva». GARA
El lehendakari y secretario general del PSE, Patxi López, declaró ayer que la CAV necesita de «acuerdos plurales, diferentes, diversos para dar estabilidad, seguridad y lealtad» a las instituciones y que eso se consigue «fundamentalmente entre PSE, PP y PNV». En parecidos términos se expresó Antonio Basagoiti, presidente del PP de la CAV, para quien, tras los resultados electorales, «ahora sólo nos queda actuar con responsabilidad y ponernos de acuerdo entre nacionalistas, populares y socialistas para hacer un gobierno, en diputaciones y ayuntamientos, diferente a lo que representa en las libertades, o en las anti-libertades, y en la economía el proyecto de Batasuna, de Bildu y todos los que se han unido contra el sentido común y el progreso del País Vasco».
López y Basagoiti tienen otro punto de coincidencia, el de responsabilizar a otros, y sobre todo al PNV, de lo ocurrido y de lo que pueda ocurrir. El lehendakari censuró al PNV su «ambigüedad calculada» en la política de pactos electorales y, tras resaltar que «no es un agente inocuo», le advirtió de que el PSE no será «de ninguna manera responsable» de que gobierne Bildu, porque su partido «siempre han puesto responsabilidad de país por encima de las siglas».
Para Basagoiti, el problema radica en que el PNV «debe tomar un camino» ante la «ambigüedad» reinante en sus acciones políticas. «Ya no puede -afirmó- estar por las mañanas en el consejo de administración de las empresas y por la tarde uniéndose a la independencia de Batasuna, mandando en las cajas de ahorro y, a la vez del lado, de los que defienden un sistema soviético». «Ahora, tienen que elegir entre Bildu y el PP y el PSOE», insistió Basagoiti.
Ni Patxi López ni Antonio Basagoiti admiten que el pacto PSE-PP haya tenido una influencia negativa en sus resultados, que en ambos partidos son peores en la CAV que del Ebro para abajo. En el Estado español, el PSOE ha perdido el 19,13% de su voto; en la CAV, el 26,6%. El PP subió en términos estatales un 7%, mientras que en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa ha perdido un 4,2%.
Pero el lehendakari declaró ayer que elecciones del 22 de mayo no fueron un examen al Gobierno de Lakua ni al de Madrid, y rechazó que el pacto con el PP sea uno de los factores que han influido en los malos resultados del PSE. Declaró que «tenemos la obligación de cumplir el mandato dado por la ciudadanía vasca hace dos años y seguir adelante con los objetivos que asumimos al llegar aquí y en ello estamos trabajando con más determinación desde el 22 de mayo».
Basagoiti, preguntado acerca de si se ha acentuado la debilidad del unionismo frente a los partidos abertzales, admitió que hay una deriva negativa y que «sin ninguna duda» se ha perdido fuelle, aunque lo achacó exclusivamente a que «el PSE se ha hundido». Por eso «hace falta algo más». Basagoiti asegura su apoyo a López, pero le pide también que cumpla y añade que habrán de buscar unas bases mínimas con el PNV. GARA
La izquierda abertzale invitó ayer a tomar nota de los resultados electorales y señaló que todas las formaciones políticas deben intentar «llegar a acuerdos» para recorrer «de la mano» el camino hacia «un proceso democrático». En una rueda de prensa convocada para valorar el próximo juicio contra varios de sus dirigentes, (información en página 11), Marian Beitialarrangoitia no quiso entrar a hacer valoraciones sobre las reuniones que está manteniendo Bildu con otras formaciones de cara a la gobernabilidad de Gipuzkoa, puesto que eso corresponde a la coalición. Pero sí señaló que «el PNV está intentando mezclar cosas y enrarecer el ambiente, mezclando el tema de los acuerdos con el proceso democrático».
Beitialarrangoitia declaró que la ciudadanía ha dejado claro que «apuesta por un proceso democrático, por un cambio y por que aprovechemos esta oportunidad que tenemos y vayamos adelante».
Por tanto, sostuvo que «los diferentes agentes políticos» tienen que «intentar llegar a acuerdos para que esto sea así» y poder recorrer ese camino «de forma conjunta, de la mano».
Según afirmó la alcaldesa de Hernani en funciones, la izquierda abertzale estará «dispuesta a hablar con el PNV» sobre esta cuestión, «ya no en clave de Gipuzkoa», sino «en clave de Euskal Herria y, por supuesto, con la dirección del EBB, que es con quien nos toca hablar». «Emplazamos al PNV a que actúe con altura de miras y responsabilidad, y en ese camino a recorrer la izquierda abertzale será un interlocutor y estará dispuesto a hablar con quien sea», concluyó. GARA
