La Comisión Europea reclamará a Madrid más recortes para 2012
La Comisión Europea (CE) continúa apretándole las clavijas al Ejecutivo de Madrid y se espera que mañana le reclame más medidas de ajuste en su proyecto presupuestario para 2012. La CE también pedirá que continúen las reformas en la legislación laboral -negociación colectiva- y en el sector financiero, e insistirá en la necesidad de regular el gasto de las comunidades autónomas. El objetivo, según el ente comunitario, es reducir el déficit público.
GARA |
La Comisión Europea pedirá al Estado español que complete las reformas estructurales emprendidas en los últimos meses, en particular la de la negociación colectiva. Bruselas recomendará además al Gobierno de Madrid que adopte más medidas de ajuste en los Presupuestos de 2012 con el objetivo de garantizar el cumplimiento del objetivo de reducción de déficit y distanciarse más de Grecia, Irlanda y Portugal, los tres países de la eurozona que han necesitado un rescate.
El Ejecutivo comunitario presentará mañana recomendaciones para los veintisiete estados miembros de cara a la elaboración de las cuentas públicas del año que viene. Se trata de una de las medidas decididas los últimos meses para mejorar la coordinación económica entre los gobiernos y prevenir futuras crisis. Las recomendaciones serán aprobadas en la cumbre de líderes europeos del 23 y 24 de junio.
En el caso del Estado español, la Comisión volverá a reclamar al Gobierno que profundice en las reformas estructurales emprendidas durante los últimos meses, en particular las que afectan al mercado laboral, como la de la negociación colectiva, que para Bruselas es fundamental dada la alta tasa de paro. Según las previsiones del Ejecutivo comunitario, el paro se situará este año en el 20,6%, el doble que la media comunitaria, y bajará al 20,2% en 2012.
El Ejecutivo del PSOE se ha comprometido a legislar sobre la negociación colectiva ante la falta de acuerdo entre patronal y sindicatos tras varios meses de negociaciones.
Sector financiero
Otra de las reformas que la Comisión considera prioritaria es la del sector financiero. «Mayores progresos en la reestructuración del sector bancario y en la consolidación fiscal mejorarían la confianza en la economía española y el acceso y el coste de la financiación», asegura el Ejecutivo comunitario en sus previsiones de primavera.
En materia de consolidación fiscal, el comisario de Asuntos Económicos, Olli Rehn, ha insistido en que el Estado español debe cumplir el objetivo de reducir este año el déficit público del 9,2% al 6% del PIB, aunque ha eludido pedir explícitamente más medidas de ajuste. Bruselas ha pronosticado que el déficit español se situará en 2011 en el 6,3%, tres décimas por encima del objetivo.
Para 2012, el Ejecutivo comunitario reclamará a Madrid que incluya en los presupuestos nuevos recortes, ya que con las políticas actuales el déficit alcanzará el 5,3%, casi un punto por encima del 4,4% al que se ha comprometido el Gobierno.
Las previsiones de crecimiento de Bruselas son más pesimistas que las que maneja el Gobierno Zapatero. La Comisión vaticina que la economía española crecerá este año sólo un 0,8% y un 1,5% en 2012, frente al 1,3% y el 2,3% que espera el Ejecutivo.
Bruselas pedirá además a las comunidades autónomas más esfuerzos en la reducción del déficit. El vicepresidente de la Comisión y responsable de Competencia, Joaquín Almunia, reclamó una ley de control de gasto, que a su juicio debería pactarse entre el PSOE y el PP.
«Mi opinión, en tanto que comisario y en tanto que español, es que los gobiernos regionales deberían introducir lo antes posible una regla de gasto jurídicamente vinculante en sus presupuestos», señaló.
Decenas de miles de personas respondieron al llamamiento realizado a través de las redes sociales y se concentraron ante el Parlamento de Atenas para protestar por los recortes y las privatizaciones. Ondearon banderas griegas y de otros estados europeos.
La ciudadanía eslovena acudió ayer a las urnas para expresar en referendum su opinión sobre la reforma de las pensiones, que plantea retrasar de los 63 a los 65 años la edad de jubilación. Con el 50% del voto escrutado, el «no» dominaba claramente con el 72% de las papeletas.