El Ejército israelí vuelve a teñir de sangre las protestas palestinas
Después de haber provocado una matanza en la conmemoración de la Naqba el mes pasado, el Ejército israelí volvió a disparar sobre los manifestantes sirios y palestinos que recordaron la Naksa, la ocupación de la meseta del Golán, Jerusalén Este, Gaza y Cisjordania, durante la Guerra de los Seis Días. Al menos 22 personas murieron y más de 300 resultaron heridas por los disparos de los soldados israelíes.
GARA | DAMASCO
El Ejército israelí mató a 22 personas, entre ellas un niño, e hirió a cerca de más de 300 en su respuesta a las manifestaciones en la meseta del Golán, zona ocupada por Israel desde la Guerra de los Seis días, según la agencia oficial siria Sana. Ali Kanaane, médico en la ciudad de Kuneitra que informó de las identidades de los fallecidos, afirmó que habían sido alcanzados por balas en la cabeza y en el pecho.
Los manifestantes recordaban el aniversario de la guerra de los seis días en 1967, en la que Israel ocupó la meseta siria del Golán además de otros territorios árabes, una fecha conocida como la Naksa, o día de la derrota.
Cientos de manifestantes, sirios y palestinos, se habían concentrado con banderas palestinas y sirias, e intentaron romper una primera barrera de de alambre de espino antes de un campo de minas, muy cerca de la ciudad de Majdal Chams. El Ejército israelí desplegó francotiradores cerca de la alambrada que separa ambos territorios
La televisión siria mostró imágenes de varios jóvenes que intentaron escalar una barrera de alambre de espino y a soldados israelíes subidos sobre un tanque disparando sobre los jóvenes. La agencia Sana denunció que los soldados también dispararon contra ambulancias y equipos de bomberos que intentaban llegar a la zona.
Igualmente, en el puesto de control israelí de Qalandia, cerca de Ramala (Cisjordania), unos 300 palestinos se manifestaron en conmemoración de la Naksa. Marcharon desde el campo de refugiados de Qalandia ondeando banderas palestinas hacia el puesto de control del Ejército israelí, donde los soldados lanzaron con gases lacrimógenos y balas de goma durante al menos tres horas. «Las ambulancias han tenido que llevarse a decenas de personas», declaró a Efe Yamal Yuma, del movimiento «Stop the Wall», que organizaba la protesta.
También se vivieron protestas en las ciudades palestinas de Belén, Naplusa y Hebrón. En Gaza, la policía de Hamas impidió a varios centenares de personas acercarse a la frontera.
Líbano
Igualmente, cerca de la aldea libanesa de Adeissi, junto a la frontera con Israel, decenas de palestinos procedentes de varios campos de refugiados izaron banderas palestinas, corearon eslóganes contra Israel y reclamaron su derecho a regresar a los territorios ocupados.
Soldados del Ejército libanés rodearon a los manifestantes para impedir que se acercaran a la frontera con Israel. La protesta se desarrolló a pesar de que ayer el movimiento de Al Fatah en Líbano anunció que se aplazaba por las medidas tomadas por el Ejército libanés. Por otro lado, los campos de refugiados palestinos estaban paralizados por una huelga general convocada para conmemorar la Naksa. El pasado 15 de mayo, aniversario de la Nakba, (catástrofe) -el inicio del exilio de cientos de miles de palestinos por la creación del Estado de Israel en su tierra- cientos de personas intentaron atravesar la frontera en el Golán y los disparos israelíes mataron a cuatro personas, además de otras diez en la frontera con Líbano. Israel ocupó en 1967 el Sinaí egipcio (restituido en 1982), el Golán sirio, Cisjordania, Jerusalén Este y Gaza.
Una delegación iraní encabezada por el presidente de la comisión de Cultura del senado, Gholam Ali Haddad Adel, visitó la frontera entre Líbano e Israel durante la jornada de protestas por el aniversario de la Naksa en apoyo a la resistencia palestina.
Hamas cerró el paso fronterizo de Rafah con Egipto en respuesta a la reanudación de las restricciones de entrada impuestas por el Gobierno de transición de El Cairo, que parece haber dado marcha atrás en su promesa de reabrir el acceso.
El presidente palestino, Mahmud Abbas, mostró su acuerdo para participar en una conferencia de paz en París, propuesta por el Gobierno francés. El consejero político de Abbas, Nimr Hammad, indicó que el acuerdo depende de la posición israelí ante la iniciativa francesa que vuelve a recoger la idea de EEUU de negociar sobre la base de las fronteras de 1967. «La base debe ser poner fin a la ocupación israelí de los territorios ocupados desde 1967 definiendo las fronteras del Estado sobre esta base, con intercambios de territorios acordados» entre ambas partes. Hamas, en cambio, estimó que la propuesta francesa «es precipitada y carece de sentido hoy», calificando las negociaciones de «absurdas». «Sólo sirve para llevar a la parte palestina a la mesa de negociaciones sin la menor contrapartida» indicó.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, afirmó que está «sopesando» la propuesta de «nuestros amigos franceses». «Evidentemente, es imposible llevar a cabo todas las propuestas. Hace falta concentrarse en una iniciativa y nosotros también tenemos ideas sobre la cuestión», afirmó. Aseguró que estudiarían cómo incluirla en otras iniciativas y «luego discutirlas con nuestros amigos americanos». En cualquier caso se negó a negociar con un Gobierno palestino en el que participe Hamas. GARA
