El cohete lanzado ayer por la tarde marcó el inicio de las fiestas del barrio de Donibane, en Iruñea, que este año durarán hasta el día 23. El honor de lanzar el chupinazo recayó en los mayordomos, que celebraban su décimo aniversario. Desde la comisión de fiestas animaron a la gente a sumarse hoy a la fiesta, que es el día de los jóvenes, pero también a que consuman en la única txosna que estará abierta, ya que el Ayuntamiento ha prohibido la segunda.

Koldo Osinaga, uno de los organizadores, explica que llevan casi un año preparando estos seis días de fiesta. «Al final todo tiene mucho trabajo y te sientes orgulloso», afirma. Sin embargo, a última hora desde el Ayuntamiento llegó la notificación de que sólo se autorizaba una txosna. «Fue la semana pasada y nosotros ya habíamos contratado dos, con dos equipos de música, con el doble de bebida, dos tomas de luz... Nos reunimos con el Ayuntamiento, les preguntamos que quién iba a pagar todo eso, pero nada, no hay forma de que cedan. Al final les arrancamos un permiso para que la única txosna fuera algo más grande», dice Osinaga. Eso sí, la txosna sólo podrá quedarse en la plaza hasta el domingo. Desde entonces hasta el jueves, se quedan sin barra.

Reducción de txosnas y días

Cada año aumentan los condicionantes. Además de la prohibición de toda pancarta de carácter político, a Donibane se le han impuesto entre permisos, seguros, baños, limitadores de ruido, etc. unos 6.000 euros de gasto antes de arrancar, sólo en infraestructuras. Además, cabe recordar que el año pasado se quedaron sin recibir subvención municipal porque se colocó una pancarta.

Para afrontar estos gastos, la comisión de fiestas sólo cuenta con el apoyo de los comerciantes y lo que se sacaba en la barra de las txosnas. En total, unos 20.000 ó 25.000 euros. En la comisión, además, ya prevén que habrá que reservar 2.500 euros para tasas de utilización de suelo y algunas de las denuncias a las que el ayuntamiento de UPN ya tiene acostumbrados a los barrios de Iruñea. Todo esto, a juicio de la comisión, «no es más que un intento de tratar de ahogarnos económicamente». Así que, como dice Osinaga, «cuanto más se beba en esa barra, ahora que está sola, mejor para las próximas fiestas».

Pese a todo, han conseguido armar un programa consistente. Ayer sonó Tximeleta en la verbena y para hoy se han programado varios conciertos. En la vaguada tocan esta noche Skatu. Itziarren Semea y la Pop'lla.

Hoy está pensado para ser el día grande de las fiestas de Donibane y su diseño ha corrido a cargo de la Gazte Asanblada. Además del reclamo de los conciertos de la noche, la tarde estará marcada por el ritmo de las rancheras. Desde el barrio se ha animado a todos a que acudan disfrazados de mexicanos.

El domingo será un día más pensado para que estén los del bario. Con la calderetada popular y el karaoke. Sin embargo, a lo largo de todo el fin de semana hay actuaciones y propuestas para todos los que quieran acudir al barrio, con espectáculos de herri kirol, kalejiras, encierros con toricos de ruedas y desfiles de los kilikis y gigantes de Alde Zaharra.