El ministro de Exteriores israelí, Avigdor Lieberman, subrayó ayer la firme oposición de Israel a que Palestina sea reconocida como Estado en la ONU y advirtió de que actuarán en consecuencia si se produjera esa declaración. En una rueda de prensa ofrecida en Jerusalén después de mantener una reunión con la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton, amenazó con desvincularse de todos los acuerdos consensuados con la ANP en los últimos 18 años, incluyendo el Acuerdo de Oslo, firmado por los entonces presidente de la Autoridad Palestina, Yasser Arafat, y primer ministro israelí, Isaac Rabin.

Lieberman recordó el acuerdo suscrito en mayo entre las organizaciones palestinas Hamas y al-Fatah y aseguró que el presidente de la ANP, Mahmud Abbas «no desea un acuerdo, sino la confrontación con Israel». Afirmó que la posibilidad de reanudar el diálogo con los representantes palestinos es nula y declaró que «la pelota está en estos momentos en el tejado palestino».

Ashton, por su parte, lamentó las declaraciones del ministro israelí, a quién pidió que «facilite y trabaje en favor de crear un marco de referencia claro que permita a las dos partes regresar a la mesa de negociaciones». La jefa de la diplomacia europea llegó ayer a Oriente Próximo con la intención de impulsar el diálogo entre las partes, para lo que se reunió con representantes israelíes y palestinos.

Por su parte, el ministro de Exteriores palestino, Riyad al-Malki, de visita oficial en el Estado español, reiteró su intención de seguir recabando apoyos para la votación en la ONU, en la próxima Asamblea General de setiembre, del reconocimiento del Estado palestino como miembro de pleno derecho.

Necesitan el respaldo de al menos 140-150 estados -la admisión de nuevos miembros requiere el apoyo de dos tercios de los 192 miembros-, y ya contarían con el beneplácito de 120.

Al-Malki desarrolla en las últimas semanas una intensa labor diplomática para recabar apoyo. Recordó que los palestinos han hecho un «importante sacrificio» al renunciar a parte de su territorio y quedarse sólo con el 22% delimitado por las fronteras de 1967.

Solidaridad vasca con Gaza

El pueblo de Gernika quiere mostrar su solidaridad con Gaza, «pueblo bombardeado y que lucha por su libertad», y todo el pueblo palestino, celebrando el domingo un acto (12, Foruen plaza) de despedida a los dos vecinos de la villa que, junto a otros vascos, tomarán parte en la Flotilla de la Libertad.

Partirá a finales de junio rumbo a Gaza para romper el bloqueo impuesto por Israel y estará integrada por quince embarcaciones, entre las que figura un barco que partirá del Estado español con varios vascos como parte de su tripulación y al que tienen intención de bautizar «Gernika». En el acto simbólico del domingo en la villa foral se leerá un texto del escritor Alfonso Sastre y una declaración institucional del Ayuntamiento, que en varios idiomas -euskara y árabe, entre ellos- se enviará a Gaza junto a una reproducción de menor tamaño del cuadro «Gernikatik mundura» que doce artistas vascos pintaron en 2003 para poner punto final a la iniciativa «Gernikatik Euskal Herrira».

El destinatario inicial del cuadro era el pueblo iraquí, invadido ese mismo año, pero las circunstancias de la guerra obligaron a retrasar aquella entrega y ahora sus impulsores han decidido sumarse a la Flotilla de la LIbertad. El cuadro original se entregará a los gazatíes cuando «vengan tiempos mejores» y se pueda hacer entrega de la obra sin la amenaza sionista.