El número de refugiados en el mundo, 43,7 millones, es el más alto desde 1995
A finales de 2010 había 43,7 millones de personas refugiadas en el mundo, la cifra más alta de los últimos quince años, informó el ACNUR. El 80% de esos refugiados se encuentran en los países más pobres, que soportan el mayor peso de los problemas que la situación conlleva.
GARA
El informe Tendencias Globales 2010 contabiliza 15,4 millones de refugiados acreditados, 27,5 millones de desplazados internos y 850.000 demandantes de asilo, una quinta parte de los cuales corresponde únicamente a Sudáfrica. En total, suman 400.000 personas más que las recogidas por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) en su informe del año pasado. Así, 43,7 millones de personas viven desarraigadas por situaciones de violencia, desastres o persecución. En 2010, sólo 200.000 personas volvieron a sus casas, la cifra más baja de la última década.
El documento destaca que el 80% de los refugiados son acogidos en países en vías de desarrollo, tal como recuerda el Alto Comisionado, Antonio Guterres. «El miedo a las supuestas avalanchas de refugiados se confunde con la cuestión de la inmigración. Sin embargo, son los países más pobres los que tienen que asumir la responsabilidad», señala Guterres en el documento. A pesar de ello los sentimientos negativos en contra de los refugiados crecen en los países ricos.
«Distribución desigual»
Su adjunto, Alexander Aleinikoff, alertó sobre la «distribución desigual» de los desplazados en el mundo. «A veces parece que las objeciones más fuertes vienen de países que no soportan la carga más grande» y demandó que todos los demandantes de asilo sean asentados de forma justa.
Precisamente, los casos más dramáticos entre los solicitantes de asilo son los 15.500 niños solos, procedentes sobre todo de Somalia y Afganistán.
Los afganos son el grupo más grande de refugiados (tres millones), seguidos de iraquíes, somalíes y congoleños. En el informe no se incluye a los casi cinco millones de palestinos, la gran mayoría atendidos por la UNRWA, lo que los convierte en el principal grupo de refugiados.
Respecto a los países de acogida, la lista está encabezada por Pakistán, con 1,9 millones, seguido de Irán (1,1 millones) y Siria (1 millón). Mientras que, por regiones, Oriente Medio recibe a siete millones de refugiados; Asia, a cuatro; África, a 2,1 millones, y América, a 800.000.
En cuanto a Europa, a finales de 2010 había 1,6 millones de refugiados, 40.700 menos que el año anterior, debido al proceso de registro y verificación llevado a cabo en los Balcanes.
Respecto al creciente sentimiento de rechazo que los refugiados provocan en algunos estados, Aleinikoff señaló que «las épocas de dificultades económicas alimentan políticas populistas, y las diferencias culturales y religiosas pueden influir también». Pero insistió en que «existe una necesidad urgente de buscar soluciones (...) para proveer seguridad y asistencia y para garantizar que muchos tengan un lugar al que llamar casa».
Tres de cada cuatro refugiados reside en países vecinos al de origen y el 42% del total vive en países donde el PIB per cápita es inferior a 3.000 dólares.
Los palestinos conmemoraron ayer el Día Internacional del Refugiado, con la esperanza de volver algún día a las casas y tierras de las que se vieron expulsados hace sesenta años a raíz de la creación del Estado de Israel.
De acuerdo con datos de la UNRWA, la agencia de la ONU que se encarga de la cuestión, el número de refugiados palestinos en los territorios ocupados, Líbano, Siria y Jordania es de 4,8 millones, el 43,4% de la población palestina en todo el mundo y una tercera parte de la población mundial desplazada forzosamente al extranjero.
La cuestión de los refugiados palestinos sigue siendo central en el conflicto de Oriente Medio y sirve de punta de lanza a la causa palestina en tanto que es uno de los asuntos fundamentales aún no resuelto.
Apelando a las consecuencias que tendría para su demografía aceptar a 4,8 millones de palestinos, Israel dice que la cuestión debe ser resuelta dentro del futuro Estado palestino o por vía de la compensación económica.
Para la UNRWA, la ocupación israelí, merced a su «política discriminatoria», no sólo vulnera los derechos de los palestinos, sino que les condena a una «pobreza crónica» y «altera el equilibrio demográfico», negando a la población palestina «el derecho al crecimiento natural» y prohibiendo la libertad de movimiento sistemáticamente.
Además, el bloqueo de Gaza ha creado, según esta agencia de la ONU, una crisis humanitaria sin precedentes, con unas tasas de desempleo del 45% y de inseguridad alimentaria del 80%. E incide, especialmente, en el trato que recibe la infancia en los territorios palestinos ocupados, donde desde 2000 han muerto 1.335 niños a raíz de la presencia militar y de colonos israelíes.
Entiende que la construcción de colonias ilegales en territorio ocupado y el traslado de colonos contraviene el derecho internacional y socava la búsqueda de la paz. GARA
