Gloria REKARTE Ex presa política
Perdularios
Tanto burguer, hot dog y manteca de cacahuete y seguro que no consumen nada de aceite de oliva, que bien bueno que es para la memoria. Y así están los USA de despistados, que se les pierde todo. Lo mismo miles de armas que millones de dólares.
A finales de 2009, la Oficina de Alcohol, Tabaco y Armas (lo mismo les da un cigarro que una ametralladora) de EEUU ingenió la operación «Rápido y furioso»: dar salida con destino a los narcos mexicanos a más de 2.500 armas de alto poder, cuyo seguimiento aseguraría la localización de los testaferros de los capos. Con los testaferros no dieron, con las armas tampoco. Se «perdieron». 2.000 rifles para francotiradores, fusiles AK-47 y otros capaces de hacer un colador del mejor blindaje quedaron en manos de los sicarios de los narcos. Fue la contribución USA al periodo más sangriento de la guerra de los cárteles mexicanos: 15.000 muertos en un año. «Para hacer una tortilla, hay que romper algunos huevos», se explicaron los arreglamundos.
Ahora han perdido varios millones de dólares destinados a la reconstrucción de Irak y que, por lo que parece, no son ninguna limosna, sino que forman parte del dinero del petróleo y las incautaciones que, tras la invasión, EEUU tomó bajo su capa protectora. Los auditores del Gobierno estadounidense han dado con un agujero de 6.600 millones de dólares. El Gobierno iraquí dice que en realidad son 18.700 los que se llevaron «en custodia» y de los que nada ha vuelto a saber.
Si con esto van a hacer otra de sus tortillas, tienen saldo como para romper todos los huevos que quieran.