GARA > Idatzia > Kirolak> Txirrindularitza

TOUR 2011 La crónica

Greipel remata la faena de Omega

André Greipel logró su primera victoria en el Tour al superar a Mark Cavendish en un sprint condicionado por la dureza de los últimos kilómetros. El alemán redondeó el trabajo de Omega, protagonista de la última subida con duro ataque de Philippe Gilbert incluído.

p031_f01_666x666.jpg

A.A.

El alemán André Greipel (Omega) se impuso en la décima etapa del Tour, disputada entre las localidades de Aurillac y Carmaux, en una llegada que se decidió al sprint y en la que Mark Cavendish (HTC) acabó segundo por detrás del que fuera su compañero de equipo en el Columbia. Thomas Voeckler (Europcar) mantiene el maillot amarillo.

No fue la típica etapa con llegada masiva, ya que las numerosas cotas que tuvieron que superar los corredores, con un puerto de cuarta categoría a falta de 15 kilómetros, propició un sinfín de ataques que no permitió trabajar en bloque a los equipos de los velocistas.

La escapada del día, compuesta por seis corredores, se formó antes de que se recorrieran los primeros veinte kilómetros. Di Gregorio (Astana), Minard (Ag2r), Vichot (FdJ), El Fares (Cofidis), Marcato (Vacansoleil) y Delaplace (Saur), que nunca pasaron de los cuatro minutos de renta, se mantuvieron en cabeza hasta que el HTC, con esporádicas ayudas del Europcar, decidió alcanzar a los fugados.

Su objetivo era la victoria de etapa con Cavendish, pero el Omega se encargó de que el plan no les saliera bien. Tras poner un ritmo endiablado en la última subida, primero fue el omnipresente Philippe Gilbert el que lanzó un fortísimo ataque en busca de su segundo triunfo de etapa. A su rueda salieron Martin (HTC), Gallopin (Cofidis), Devenyns (Quickstep) y el propio Voeckler, y la falta de entendimiento entre ellos condenó el intento al fracaso.

Intentos de Euskaltel

Fueron momentos de indecisión en la carrrera, ya que el tren del HTC se veía mermado en efectivos y fueron varios los aventureros que intentaron sacar tajada de la situación. Mención destacada en ese sentido para los corredores del Euskaltel Euskadi, que se dejaron ver siempre en cabeza. De hecho, Gorka Izagirre y Gorka Verdugo intentaron sorprender al grupo, pero sus ataques acabaron siendo totalmente estériles.

Una vez reagrupado el pelotón, Mark Cavendish cogía la rueda de Tony Martin, el único compañero de equipo que le quedó para lanzar el sprint. El de Isla de Man se las prometía felices, pero el Omega tenía preparada su segunda opción. André Greipel se abría a la izquierda y superaba in extremis al británico, con José Joaquín Rojas (Movistar) llegando por detrás en la tercera posición.

En la clasificación general no hubo cambios, y Thomas Voeckler sigue como líder con 1.49 de ventaja sobre Luis León Sánchez (Rabobank), 2.26 sobre Cadel Evans (BMC), 2.29 sobre Frank Schleck (Leopard) y 2.37 sobre Andy Schleck (Leopard).

Aunque la intensa lluvia caída en la salida de Aurillac y la montonera registrada nada más comenzar la etapa pudieran hacer pensar lo contrario -corredores ilustres como Leipheimer (Radioshack), Gesink (Rabobank) y Cancellara (Leopard) se vieron involucrados en la misma-, la jornada no deparó demasiadas despedidas en la carrera, más allá de las de Popovych (Radioshack), que no tomó la salida por problemas físicos, y Kolobnev (Katusha), tras el positivo conocido en la tarde del lunes por un diurético enmascarador.

Hoy se disputa la undécima etapa del Tour, con 167,5 kilómetros entre Blaye-Les-Mines y Lavaur. Será la última etapa, relativamente llana, antes de que la ronda gala llegue a su cita anual con los Pirineos.

CAÍDA

Nada más comenzar la etapa hubo una nueva caída en la que se vieron involucrados Levi Leipheimer, Robert Gesink y Fabian Cancellara. Por lo demás, a pesar de la lluvia que cayó en la salida, no hubo mayores incidentes en la carrera.

Un esprínter competitivo pero amable

André Greipel, que calificó su triunfo de Carmaux como «la victoria más hermosa» de su vida, prefirió reservarse lo que piensa de Mark Cavendish y hacer honor a su reputación de esprínter amable. «Yo no respondo en los medios, hablo con la bicicleta», aseguró ante las insistentes preguntas que le hicieron sobre las provocaciones de su ex compañero, quien tras ganar la séptima etapa dijo que «he ganado casi sin dar pedales».

«Yo no me rebajo a eso, yo hablo sobre la bici. Pero le respeto mucho, ha ganado 17 veces aquí y yo hoy he conseguido la primera victoria, la más importante de mi vida, el momento mas feliz junto al nacimiento de mis dos hijas», aseguró el ciclista alemán de 28 años.

Son muchas las perlas que ha dejado Cavendish sobre Greipel. «No ganarás ninguna carrera en este equipo mientras yo esté aquí», «sólo gana en carreras de mierda» o «yo al cincuenta por ciento y él a tope, puedo ganarle», son algunas de las que obligaron al alemán a abandonar el Columbia y buscarse otro equipo.

«Le gusta mucho hablar de los demás, incluido de mí. Yo me centro en mis objetivos», se limitó a decir ayer Greipel, a quien sus directores le reprochan su suavidad casi monacal. «Puede que sea alguien demasiado amable, pero soy como soy. A lo mejor tengo que ser más agresivo, que esa es una cualidad en el esprint. Yo creo mucho en la motivación», aseguró.

No obstante, tras la etapa de Châteauroux volvió a su autobús quejándose de que su equipo sólo pensaba en Gilbert, que no trabajaba nada para él. «Esto no es un equipo», le oyeron decir. Ayer, sin embargo, se retractó tras abrazarse con su compañero de equipo: «No lo pensaba, era la adrenalina que llevaba encima. Ahora tenemos otros objetivos y llevar el maillot verde a París es algo muy complicado para lo que tenemos que trabajar». EFE

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo