El frente libio vuelve a estancarse a unos cien kil�metros de Tr�poli, donde fuerzas rebeldes se han atrincherado en la localidad de Qwaleesh despu�s de que perdieran su control durante el mi�rcoles y tras mantener varios combates con las tropas de Muamar al-Gadafi. �stas, por su parte, se retiraron de los alrededores de Al-Assabaa, a unos veinte kil�metros al este.

�sta es la segunda ocasi�n en una semana en que las fuerzas gubernamentales pierden Qwaleesh, un enclave fundamental para los rebeldes en su intento de llegar hasta la capital libia. El avance rebelde se llev� a cabo con m�s entusiasmo que organizaci�n, lo que preocupa a sus comandantes, que reconocen errores que posibilitaron el contraataque gadafista y al menos ocho bajas entre sus filas.

Los sublevados aumentaron su n�mero y reforzaron sus defensas en la localidad con el apoyo de artiller�a pesada, unas dotaciones que el mi�rcoles todav�a no pose�an. Pretenden utilizar Qwaleesh como punto de partida para hacerse con el control de Garyan, la localidad clave en su camino a Tr�poli. En este contexto, hoy comienza en Estambul la cuarta reuni�n del Grupo de Contacto sobre Libia, centrada en nuevas ayudas a los rebeldes y en un eventual abandono del poder de Al-Gadafi.

En el encuentro participan representantes de 40 pa�ses, adem�s de la ONU, la Liga �rabe, la Uni�n Africana, la OTAN y el rebelde Consejo Nacional de Transici�n. El Gobierno de Ankara ha invitado a Rusia y a China, aunque ambos han adelantado que no asistir�n. Debido al estancamiento militar, Par�s ha comenzado a tantear al Ejecutivo de Tr�poli para alcanzar una salida diplom�tica, e Italia y Turqu�a plantean una tregua.