La música y los museos absorben una tercera parte del gasto público
Según un estudio del Observatorio Vasco de la Cultura, en 2008 el conjunto del gasto cultural de las administraciones públicas de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa ascendió a más de 510 millones de euros, lo que da un ratio parecido al de Suecia o Austria, de 234 euros por habitante.
GARA | BILBO
El Observatorio Vasco de la Cultura presentó ayer la primera estadística de financiación y gasto público en cultura de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa. Según se desprende de ese estudio, la música y los museos son los ámbitos más destacados en cuanto al destino del gasto de las administraciones públicas, al absorber en conjunto algo más de uno de cada tres euros.
La música absorbió en 2008 95,8 millones de euros y el gasto en museos, 91,4 millones. En total, el gasto cultural de las administraciones públicas ascendió a más de 510 millones de euros, lo que da un ratio de 234,8 euros por habitante, según explicó en Bilbo el viceconsejero de Cultura del Ejecutivo autónomo, Antonio Rivera. Acompañado de responsables del Observatorio y de la diputada foral vizcaina de Cultura, Josune Ariztondo, Rivera ofreció datos referidos al ejercicio de 2008, cuando todavía no se habían aplicado en la Administración los recortes presupuestarios motivados por la actual crisis.
En su elaboración, han tomado parte el Gobierno de Lakua, las Diputaciones, un total de 192 ayuntamientos y los organismos autónomos y sociedades públicas dependientes de las distintas administraciones.
A falta de estudios con igual metodología que permitan una comparativa rigurosa, los responsables del trabajo indicaron que el gasto público por habitante en el año de referencia (234,8 euros) se asemeja al de países como Suecia (236 euros por ciudadano) y Austria (274 euros por habitante).
La estadística elaborada evidencia que los ayuntamientos dedicaron a cultura en torno a 300 millones de euros (el 9,3 % de sus presupuestos totales), el Gobierno destinó 57,4 millones (0,6 % de su presupuesto) y las diputaciones 104,6 millones (3,6 % de sus presupuestos). Además, se destinaron 180 millones de euros a medios de comunicación, gran parte a EITB.
De cada 100 euros destinados a cultura, 56 correspondieron a los ayuntamientos, veinte a las diputaciones, once a Lakua y el resto a los organismos autónomos y sociedades públicas.
El empleo público directamente vinculado a la cultura se cifró en 2.710 puestos de trabajo.
Respecto al destino del gasto público en este ámbito, se sitúa, tras la música y los museos, la denominada acción cultural -concepto bajo el que se agrupan programas promovidos desde los equipamientos comunitarios y socio-culturales y los equipamientos y servicios culturales polivalentes-, a la que se destinaron 69,7 millones.
Para llevar a cabo fiestas populares se destinó 8,4 de cada de 100 euros del gasto en cultura, similar a lo destinado a bibliotecas o a patrimonio.
La diputada vizcaina Josune Ariztondo puntualizó en este apartado que un elemento importante de las fiestas es la música y «no se tiene en consideración». Animó, asimismo, a efectuar en próximas ediciones del estudio «ajustes metodológicos», al cuestionar algún aspecto de la metodología empleada.
Financiadores
El viceconsejero, que puso de manifiesto la complejidad técnica del estudio, señaló también el papel «financiador» que tienen el Gobierno de Lakua y las diputaciones hacia otras entidades, que ejecutan el gasto en cultura.
En este sentido, el Ejecutivo efectuó en 2008 transferencias con dicho fin por valor de 43,2 millones de euros y las diputaciones por una cuantía de 52,6 millones.
En lo referente a los 192 ayuntamientos con los que ha colaborado el Observatorio Vasco, estas instituciones combinan su carácter ejecutor y financiador, por lo que destinaron casi 105 millones de euros a transferencias corrientes o de capital.
El programa Kimuak ha seleccionado este año un «thriller obsesivo y deliberadamente retorcido», dirigido por Galder Gaztelu-Urrutia y protagonizado, entre otros, por Martxelo Rubio (en la imagen). Gran espaldarazo para la difusión dentro y fuera del país.
Tras la música y los museos, los destinos del gasto cultural son la denominada acción cultural (programas, equipamientos y servicios polivalentes), las fiestas populares, las bibliotecas y el patrimonio.