Rubalcaba: «La batalla política hay que darla en términos democráticos»
El candidato del PSOE a La Moncloa, Alfredo Pérez Rubalcaba, reiteró ayer que ha interiorizado que «ahora viene la batalla política» y que asume también que «hay que darla en términos democráticos». Dijo incluso que está haciéndoselo ver a sectores como las víctimas de ETA, «que tienen una desazón enorme». Pero preguntado por qué pasará si gana el independentismo, respondió: «Bueno, ser independiente en España tiene sus trámites, hay una Constitución...»
R.S. |
Alfredo Pérez Rubalcaba, líder del PSOE y aspirante a presidente del Gobierno, ha cambiado su discurso en los últimos días para pasar a asumir que el Estado afronta una «batalla política» contra el independentismo vasco. Ayer, en una entrevista a Radio Euskadi, dio un paso más al añadir que esa pugna «hay que darla en términos democráticos». Sin embargo, por el momento, Rubalcaba elude la existencia de una barrera objetiva y no-democrática contra el independentismo: el marco jurídico español, que impide en la práctica materializar esa opción.
Al candidato del PSOE se le planteó qué ocurrirá si son los independentistas los que ganan esa pugna política, y tras dudar unos segundos, esgrimió que «ser independiente en España tienen unos trámites. Hay una Constitución, hay unas cosas que cambiar... así que es una hipótesis que no preveo».
Acto seguido, Rubalcaba afirmó que su prioridad actual es dejarle claro a la opinión pública española que la posibilidad del final de ETA no significa que vaya a desaparecer el independentismo vasco, del que recordó que, de hecho, «está hoy al frente de instituciones muy importantes». Dijo estar percibiendo en el Estado «una sensación de que `hemos perdido', y no es verdad: hemos ganado porque no hay violencia. Pero una cosa es el terrorismo y otra el independentismo», insistió. Según añadió, este criterio se lo está transmitiendo también a sectores sensibles como las víctimas de ETA, «que tienen una desazón enorme».
«Igual ha sido la última vez»
Alfredo Pérez Rubalcaba insistió en alertar sobre esta «batalla política que llega» después de remarcar su optimismo respecto a la superación de la página del conflicto armado. Recordó que ya han transcurrido dos años sin atentados de ETA, con la excepción del tiroteo que costó la vida a un sargento francés y al que el ex ministro de Interior aludió como un incidente.
Así las cosas, opinó que «hay que ser muy cauteloso por la experiencia que tenemos», pero se mostró esperanzado en que «estamos recorriendo los últimos metros de la lucha antiterrorista, y por eso es necesario que no metamos la pata».
En la misma línea, el aspirante a la sucesión de José Luis Rodríguez Zapatero recordó que, en muchos funerales, familiares de víctimas de ETA le han pedido que ésa fuera «la última vez». Y afirmó al hilo de ello que «no lo puedo afirmar rotundamente, pero igual resulta que ya ha sido la última vez».
En este punto, presionó a Bildu para que se dirija a ETA y le pida su disolución, tras argumentar que después de su llegada a las instituciones «parece que ha retrocedido un poco». A Rubalcaba se le preguntó si le pareció suficiente la presencia de miembros de Bildu en el homenaje a Joxe Mari Korta anteayer en Zumaia y dijo que por encima de fotos concretas lo rele- vante es que «haya una posición sistemática de reconocimiento del dolor que ETA ha causado».
En su interés por presionar a Bildu, Rubalcaba afirmó que aprecia que ha bajado el nivel de sus emplazamientos a ETA después de las elecciones y del acceso a muchos órganos de poder. En este contexto, añadió que advierte una sensación general de que «las cosas están paradas». La izquierda abertzale le dio réplica en una nota en la que remarcó que «la principal causa de que el proceso democrático de búsqueda de soluciones no avance al ritmo que la sociedad nos exige a los agentes políticos es la actitud de bloqueo que a lo largo de los últimos meses y años ha imperado en Madrid». Y señala específicamente al propio Rubalcaba por su «especial protagonismo».
En concreto, los independentistas recordaron que la apuesta de la izquierda abertzale por abrir un nuevo escenario político ha sido respondida «con ilegalizaciones y represión» desde el Estado español. Y pese a todo ello, le recordó al candidato del PSOE que se ha producido «una nueva situación» y también se han dado «unos pasos que, por mucho que le pese a Rubalcaba, la sociedad vasca ha reconocido y apoyado».
Por ello, la izquierda abertzale añadió en su nota un emplazamiento «tanto al PSOE como al PP» para que «dejen de lado la actitud de imposición y boicot a los nuevos tiempos». Pidió en paralelo a las formaciones que lideran Alfredo Pérez Rubalcaba y Mariano Rajoy que «tomen una actitud proactiva y constructiva para con el proceso de soluciones abierto en Euskal Herria, dejando de lado el vacuo discurso de la insuficiencia y den por finalizada la fase de las ilegalizaciones y de la vulneración masiva de derechos». GARA
