
Maite SOROA
En busca de la prueba definitiva
Cada vez que Bildu, la izquierda abertzale o cualquiera de las asociaciones que reivindican el respeto a los derechos c�vicos y pol�ticos son noticia, la caverna reacciona diciendo �ahora s�, tenemos la prueba definitiva�.
Eso mismo hac�a �El Mundo� editorializando sobre la manifestaci�n convocada por Eleak, bajo el t�tulo �M�s pruebas para actuar contra Bildu�, y es que los de Pedro J. pudieron comprobar que �La manifestaci�n convocada en San Sebasti�n por asociaciones de la llamada izquierda abertzale para la legalizaci�n de Sortu acab� siendo un homenaje a los presos de ETA�. De modo que pedir la repatriaci�n de los presos pol�ticos vascos es una prueba para actuar contra Bildu. Una cre�a que esa reivindicaci�n, que no es s�lo de la izquierda abertzale, es una defensa de derechos elementales, y el hecho de que sea tan habitual y masiva s�lo prueba que la mayor parte de la sociedad vasca la hace suya. Pero en ese diario est�n acostumbrados a contar una realidad acorde al titular decidido de antemano, y de lo que se trata es de aportar �pruebas� para ilegalizar, en nombre de esa democracia a la que no le gusta la participaci�n de quienes no piensan como los �espa�oles de bien�. Y ese terrible delito de reivindicar la repatriaci�n de los presos vascos fue cometido tambi�n por Bildu: �En la marcha participaron dirigentes de Bildu y de la ilegalizada Batasuna. Desde que accedieron a las instituciones, gracias al Constitucional, los cargos p�blicos de Bildu han dado muestras evidentes de que ni han roto con ETA, ni est�n dispuestos a condenar los atentados de la banda, ni tampoco a reparar a las v�ctimas�. Ni a hacerse suscriptores de �El Mundo�. Est� muy bien eso de �gracias al Constitucional�; en cualquier caso, a los y las escribientes de ese diario ya se les hab�a ido la olla antes de la sentencia del Constitucional. Y ah� siguen, vigilantes, descubriendo agazapadas (y agazapados) en las manifestaciones a representantes de Bildu.
Tras mostrarse de acuerdo con la secretaria general del PP, Mar�a Dolores de Cospedal (qu� casualidad), que instaba a la ilegalizaci�n de Bildu, concluye la pieza con una duda: �Veremos cu�nta `vigilancia' m�s se necesita para actuar�. La que sea necesaria, para eso est�n Pedro J. y sus muchachos.