No habrá inicio liguero, pero al menos se acercan posturas entre la AFE y la LFP. Eso parece desprenderse de la primera reunión que mantuvieron ayer ambos organismos, la primera de las tres previstas hasta el próximo lunes. La siguiente será hoy en la sede del sindicato de los futbolistas.

En ese clima algo más positivo y menos tenso que en anteriores jornadas, el gerente de la AFE, Luis Gil, reconoció que en el encuentro «por lo menos en esta ocasión se han colocado las propuestas sobre la mesa, algo que no ocurrió en la reunión del jueves. Ahora toca valorarlas y ha habido algunos avances».

En un tono también sosegado, la otra parte, representada por José Luis Astiazaran, máximo dirigente de la LFP, precisó que «los jugadores tienen derecho a hacer huelga», e indicó que «ha habido diálogo y eso siempre es positivo, por lo que intentaremos llegar a un consenso», especificó.

El presidente de la patronal futbolística quiso dejar claro que la competición no se adulterará con ningún recorte, ante el rumor de que pudiera quedar conformada con sólo 37 jornadas. «No contemplamos una Liga así, pero todo está en el aire», reconoció Astiazaran.

Los árbitros no viajarán

Los colegiados designados para los encuentros de Primera y Segunda División de la jornada inaugural no se desplazarán a los estadios donde se deberían celebrar los partidos, una medida conocida por la AFE tras mantener contactos con la RFEF, y que considera una «práctica anti-huelga».

«Las decisiones impulsadas desde la LFP constituyen prácticas contrarias al derecho de huelga y la libertad sindical. Cualquier actuación de los clubes dirigida a recabar de los jugadores su conformidad, o no, a la convocatoria de los partidos programados, resulta una manipulación carente de sentido», denunció el sindicato de los futbolistas.