Juanjo Cobo reconocía que los ánimos de los aficionados le ayudaron a aguantar el ataque de Froome en el ascenso final, «aunque en algún momento llegué a pensar que lo iba a perder todo. Cuando Froome ha atacado en las rampas más duras me he hundido un poco y no sabía si iba a poder cogerle, pero al final he podido sacar fuerzas de donde no las había».

Christopher Froome lo tenía claro, «pensaba en la etapa de hoy para ganar la Vuelta, la tenía en la cabeza, pero ahora la única forma de ganar pasa por conseguir bonificaciones en los sprints intermedios, así que habrá que luchar por ellos -anunciaba-. Conocía la subida, y sabía que el último kilómetro sería decisivo. Conseguí abrir hueco y pensé que sería suficiente, pero Cobo reaccionó. Cuando le vi a mi lado pensé que me quitaba la etapa. Fue un desenlace electrizante».

Antón: «Estoy aprendiendo»

Otro que terminaba la etapa con sabor agridulce era Igor Antón, el mejor vasco en la jornada de ayer, pero consciente de que no ha estado a la altura de lo que se esperaba de él. «Estoy contento por lo que he hecho en una Vuelta en la que venía a por algo más, pero estoy aprendiendo mucho. Después del Giro de Italia las cosas no han salido como queríamos. Hoy lo he dado todo, pero no ha podido ser en un puerto que había subido entrenando y que tenía ganas de subirlo en carrera».

Joaquim Purito Rodríguez, por su parte, acusaba la caída sufrida el martes y no pudo aguantar el ritmo de los mejores, aunque tampoco quiso poner el accidente como excusa de su bajón: «Tenía miedo a pasarlo mal, pero he tenido que sufrir mucho. El dolor de la caída de ayer y el cansancio acumulado por toda la Vuelta no me han permitido estar más arriba. Igual hubiese podido estar un poco más arriba sin la caída -explicaba-, pero también es cierto que los días anteriores tampoco había estado con los mejores».

Y un último detalle, aportado por Wiggins en su twitter refiriéndose a su compañero Froome: «Chris Froome going from strength to strength, Superb. And all that after people shouting at him, "you win we kill you", unbelievable». [Chris Froome iba viento en popa, magnífico. Y la gente le gritaba `si ganas te matamos'. Increíble].