Un recorte histórico que pagarán los de siempre
El Gobierno de Nafarroa presentó ayer el mayor recorte de gasto en los presupuestos jamás aprobado en el herrialde, cuya cuantía asciende a más de 190 millones de euros pero que antes de que acabe el ejercicio se acercará a los 300 millones. Según los datos ofrecidos por la presidenta, Yolanda Barcina -que compareció ante los medios acompañada por todo su Gabinete-, será el Departamento de Cultura el que sufrirá en mayor medida el alcance del ajuste presupuestario, pero éste alcanzará a todos los sectores. Se trata de toda una declaración de intenciones del Gobierno navarro, que ha decidido centrar en el gasto la respuesta a sus problemas de financiación, evitando actuar en el sistema tributario para incrementar los ingresos públicos o redistribuir la carga fiscal de forma más justa. Tampoco se verán resentidas las ayudas fiscales concedidas a las empresas en función del Impuesto de Sociedades, que podrían conjugar buena parte de la deuda, y se mantiene la bula a obras e infraestructuras muy contestadas.
El alcance de este recorte es histórico en sus dimensiones, sin embargo, quienes paguen sus consecuencias serán los de siempre: los trabajadores de las distintas ramas del sector público y los ciudadanos y ciudadanas, que verán deteriorados los servicios públicos, especialmente en el ámbito de la salud y la educación.