Familiares de niños autistas denuncian la práctica de la terapia del «packing»
Familiares de niñas y niños autistas realizaron ayer en Biarritz un acto de denuncia del «packing», una terapia que se aplica en el Estado francés y que critican varios organismos internacionales.
Ainize BUTRON | BIARRITZ
Una veintena de familiares de niños y niñas autistas denunciaron ayer delante del casino de Biarritz la práctica en los centros de salud del Estado francés de la terapia del «packing». El casino acogía un coloquio de sicoterapeutas en el que se trataba, entre otros temas, esa terapia que, según informan las asociaciones de personas afectadas por el autismo, «ha sido condenada por la comunidad científica internacional».
Practicada, sobre todo, en niños que presentan «trastornos graves del comportamiento», el «packing» consiste en enrollar al niño desnudo con una sábana mojada, previamente metida en una nevera a una temperatura de entre cinco y diez grados.
Para los sicoanalistas que defienden este tratamiento, el objetivo del choque térmico es recrear la «piel síquica deficiente en esos niños».
Ayer, los familiares hicieron una demostración pública de lo que representa esta terapia y aparecieron enrollados en una sábana y enmascarados con la anotación «autista» en la frente. Cecile Lafitte, integrante de Autisme TED Côte Basque recordó que esa terapia sólo se practica en el Estado francés y en Argentina, «países en los que los sicoanalistas siguen teniendo fuerza». «El `packing' va en contra de la ética y la deontología médica», subrayó. Durante la acción simbólica, Lafitte leyó un comunicado conjunto de las distintas organizaciones de familias de autistas de Aquitania y del resto del Estado.
«El `packing' es una práctica de maltrato y agresiva, sin ninguna evaluación científica y condenada recientemente por la comunidad científica», insistió. Pese a que su supuesta eficacia no ha sido verificada, son muchos los centros de salud que la practican.
Cuarenta años de retraso
Los familiares de niños autistas han denunciado en varias ocasiones su utilización ante el Ministerio francés de Salud, sin ningún resultado. «Se considera que el `packing' no supone un peligro para la salud, pero la cuestión ética y la posibilidad de maltrato no se han estudiado», denunció Lafitte. También dijo que la mayoría de los profesionales en el Estado francés tienen cuarenta años de retraso tanto en la teoría como en la práctica sobre el autismo.
Por ello, señalaron que es imprescindible que las mentalidades cambien: «Los niños autistas tienen el derecho de recibir los cuidados apropiados y de beneficiarse de terapias reconocidas y que garanticen su mejor seguridad sanitaria».