XALA 22

SARALEGI 12

Aunque el marcador final pueda indicar lo contrario, Ekaitz Saralegi fue capaz de meter en aprietos al campeón manomanista ayer en el Astelena. De hecho, a mitad de partido llegó a poner de su lado unos momios iniciales muy adversos, cuando se adelantó 8-10 y 10-11 pero, muy lejos de aquel pelotari apático que se dejaba llevar en los momentos complicados, el Xala actual sabe sufrir y sacó su mejor versión en el momento más complicado para lograr el pase a cuartos de final, donde se medirá a Titín III. De esta manera, la segunda jornada del Cuatro y Medio se cerró sin ninguna gran sorpresa, y el pase a la liguilla se disputará sin ninguna ausencia demasiado significativa.

El partido de ayer en el frontón eibartarra tuvo dos partes muy diferenciadas. En la primera, el juego en corto de Ekaitz Saralegi, sus remates cruzados al ancho y el agarrotamiento y las dudas del primer partido del de Aspe hicieron, por momentos, dudar del lekuindarra. Por mucho que lograra adelantarse 6-2, sus inofensivos saques, sus pelotazos sin brillo, y su aparente indolencia a la hora de buscar algunas pelotas, recuperaron para la memoria colectiva al frío pelotari que enseguida desconectaba cuando la musa del acierto no estaba de su lado.

El propio Ekaitz Saralegi fue, hace dos años, el que se aprovechó de aquella inconsistencia para eliminarle a las primeras de cambio en esta misma competición. Ayer el amezketarra tuvo su momento, en el que llegó a soñar con repetir la hazaña, en el instante en que, tras buscar muy bien los ángulos en tres tantos consecutivos y otro directo de saque, logró adelantarse 10-12 en el marcador.

Sin embargo, poco o nada tiene que ver el Xala de hasta esa eliminatoria de primera ronda de la jaula de 2009, y el actual. La progresión física desde ese punto de inflexión que supuso aquella temprana eliminación ha sido más que evidente y, sobre todo, el lapurtarra ha madurado mucho mentalmente.

Parcial demoledor

Lejos de aquel pelotari que parecía dejarse llevar ante las primeras dificultades, el Xala actual sabe sufrir dentro y fuera de la cancha, y ayer supo responder con un parcial demoledor de 12-1 a los momentos de mayor complejidad.

Si hasta entonces sus saques habían sido benévolos con el rival, el campeón manomanista comenzó a obligar a Saralegi que, si bien sólo encajó un tanto desde la jugada inicial, sí que sufrió el saque-vuelta del de Lekuine. En el ecuador del partido Xala metió una marcha más y eso se vio refrendado en que su demoledora volea comenzó a arrinconar al guipuzcoano contra el txoko, con lo que los tantos corrieron a su favor.

En cuanto los pelotazos del delantero de Aspe comenzaron a llevar picante, el de Asegarce sólo pudo sumar un tanto en una pelota a la que Xala se colocó mal y, de esta manera, el campeón manomanista logró devolverle el marcador que Ekaitz Saralegi le endosó hace dos años en el Atano III.