La Behobia para atletas con discapacidad sigue creciendo. La prueba está en que la edición número 27 batirá el récord de participación con 109 inscritos en las distintas categorías y verá la incorporación de una nueva especialidad, la de handbike, el equivalente de la bicicleta impulsada con las manos.

Como siempre, los atletas en silla de ruedas serán los primeros en tomar la salida en Behobia (10.20) y también en alcanzar la meta del Boulevard, si no les adelanta alguno de los participantes de la nueva disciplina.

Entre la quincena de inscritos repite el podio al completo de la anterior edición: el trío francés encabezado por Willy Couderc e integrado también por Philippe Le Gouic y Olivier Lambert. Junto a galos y portugueses también habrá vascos, siete de ellos de Kemen -la agrupación deportiva de minusválidos vascos encargada de la organización- que después de una cuantas ediciones corriendo sobre mojado tendrán suelo seco, si se cumplen las previsiones meteorológicas que apuntan a 20º con viento sur. Esto significa mayor seguridad para esas sillas que en los tramos cuesta bajo pueden llegar a alcanzar «los 60 ó 70 kms/h», según explicó Javier Imaz, presidente de Kemen.

En seco tendrán más posibilidades de atacar el récord de Joel Jeannot, que en 2003 voló hasta los 46.42. El paralímpico galo regresa a Donostia en el estreno de la handbike, con 17 participantes dispuestos a rozar los 40 minutos en los exigentes 2o kilómetros de recorrido.

Se incrementará asimismo la partipación de discapacitados visuales divididos en dos categorías. En B-1, la de ceguera total, los 14 inscritos acuden con sus respectivos guías. Serafín Lizoain, más conocido con su seudónimo de Zubiri en su faceta artística, es un participante habitual que además conoce el podio. En la otra categoría, la de B2, en la que los participantes cuentan con cierto campo visual, destacan Alberto Suárez Laso y Mari Carmen Paredes. El asturiano corre sin guía y con 1.05:02 fue sexto el pasado año entre 17.437 atletas que llegaron a meta. Lleva un buen otoño, batió el pasado 9 de octubre en el Memorial Enzo Ferrari (Italia) el récord mundial de maratón (2.25:01). La catalana, en esa misma prueba, firmó 3.00:16.

En discapacitados a pie, el favorito es José Antonio Castilla, aunque Toni Franco y el navarro Xabier Villaba también cuentan. El récord parece a salvo. Lo tiene Javi Conde desde 1998 cuando corrió en 1.04:13.

Tanto las sillas de ruedas como ahora el handbike están encuadradas en el Trofeo Euskaltel, un patrocinador fiel que lleva 16 años apadrinando la carrera. Desde la empresa naranja pretenden seguir apoyando este apartado, según aseguró ayer su representante Víctor Córdoba. También Iñaki Almandoz con el Trofeo Kutxa de los invidentes. «Estamos orgullosos de esta colaboración», coincidieron y los organizadores agradecidos. ¡Con la que está cayendo!