División de Honor femenina
Bera Bera no falla en casa
Las donostiarras no dieron opción al Castro, y Karrere dosificó los minutos de cara a la eliminatoria europea.
BERA BERA 33
CASTRO 22
Juan Carlos ELORZA
Bera Bera necesitaba quitarse el mal sabor de boca que le dejó su derrota en Elche y mantener su buena trayectoria en casa, y el Castro apenas consiguió aguantarle el primer cuarto de hora. Y eso que a las donostiarras les costó unos minutos entrar en materia, que la vizcaina Tania Yáñez aprovechó para poner a su equipo por delante (1-3).
Pero la defensa de Bera Bera empezó a funcionar, Zoqby ayudó en la portería, y en ataque las buenas combinaciones entre Rubio, Bea Fernández y Eli Pinedo, casi siempre finalizadas por la voraz extremo amurriotarra -marcó sus cinco goles en el primer cuarto de hora, y descansó toda la segunda parte- establecieron una primera brecha de cinco goles que ya no dejaría de crecer. Y eso que de repente ambos equipos abrieron un paréntesis y dejaron de marcar.
Castro consiguió su octavo gol y no logró el noveno hasta casi 12 minutos después, y Bera Bera se quedó clavado en el 15 durante diez minutos. Castro acusaba su falta de relevos para sus dos laterales, y a Bera Bera se le atragantaba el cambio en la portería cántabra cuando Muñoz -que ni rozó un balón en 19 minutos- dejó su puesto a Zorrilla para intentar parar un penalti a Rubio.
Lo consiguió, el entrenador la premió manteniéndola en pista, y Zorrilla se lo agradeció enlazando cinco paradas consecutivas -entre ellas otro penalti, a Bea Fernández, y un contrataque sin oposición a Eli Pinedo-.
Tras el descanso Reyes Karrere repartía minutos entre todas sus jugadoras y, mientras Castro se defendía como podía con los goles de su pivote Martínez y su extremo izquierdo Trojaola, Bera Bera estabilizaba su ventaja en diez goles. Además, Alba Menéndez marcaba su primer gol de la temporada al finalizar un contrataque, dejando ver que su lesión está felizmente superada.
Reyes Karrere aprovechaba para foguear en labores defensivas a jugadoras menos habituales como Campa (1'86 metros) y Mena (1'82) aunque, justo en la primera jugada en que ambas coincidieron en el centro de la defensa 6:0, Elorza marcaba su único gol en suspensión por encima de la barrera, apuntando que les quedan algunos conceptos defensivos por asimilar.
La recta final dejó dos detalles: uno curioso, cuando el técnico cántabro pedía un tiempo muerto a falta de 50 segundos -al parecer «molesto» por los dos solicitados por Karrere en el lapso de tres minutos para corregir a sus jugadoras-, y la mesa se lo concedía justo cuando Trojaola volaba para marcar su séptimo gol, que fue invalidado.
Y un pase de contrataque buenísimo de Verónica Cuña, al que Matxalen Ziarsolo correspondió con el gol que cerraba el partido.