Anaitasuna se medirá con el Aragón -La Catedral, 20.00- con la esperanza de sumar su segundo triunfo casero, siempre y cuando consiga contrarrestar la velocidad de un rival muy ofensivo, pero que todavía no ha dado la talla lejos de su pista, ya que esta temporada sólo ha ganado a domicilio al Antequera.

Ayudada por su afición, la escuadra blanquiverde tratará de dar una nueva campanada ante un rival de la zona alta de la tabla. Sumar sería una inyección de moral para los de Etxaburu, tras venir de perder, antes del parón liguero, en la cancha del Guadalajara.

Conocidas las bajas seguras de Maxi Cancio y Pocholo, el técnico eibartarra podría completar la lista con algún chaval del filial, aunque ésa será una decisión que tomará minutos antes del inicio del encuentro. Sin duda, la clave de un nuevo triunfo residirá en frenar a «uno de los rivales más veloces de la Asobal» y también de los más efectivos, no en vano es el tercero más anotador -242 goles-, por detrás de los todopoderosos Barcelona y Atlético de Madrid.

«Para plantar cara a este equipo tendremos que bajar a defender muy rápido y organizar la defensa leyendo bien lo que tenemos por delante a gran velocidad. Está unos escalones más altos que nosotros, pero sabemos lo importancia de jugar en casa con un público ilusionado y vamos a dar el máximo para intentar llevarnos algún punto», señaló el técnico local.

Los maños no quieren volver a fallar en otra salida y su míster, Mariano Ortega, podrá disponer de uno de sus pilares y viejo conocido de la afición navarra, el ex antoniano Demetrio Lozano. El lateral madrileño ya se ha recuperado de un edema en su rodilla izquierda, que se produjo en León.

Día del no socio

Anaitasuna ha ideado una curiosa iniciativa denominada «Día del no socio», que se celebrará coincidiendo con la visita del Valladolid -día 23, miércoles-, en la que los socios de la Sociedad Anaitasuna, pero no del equipo de balonmano, entrarán gratis y el resto de aficionados no socios dispondrán de entradas al precio de 5 euros.

Asimismo, se celebrará un espectáculo con coreografía, percusión y música antes del encuentro y durante el descanso habrá una actuación. Con todo ello, Anaitasuna quiere «arropar a la primera plantilla y fomentar el balonmano entre todos los navarros».