El director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Yukiya Amano, pidió ayer a Irán que aclare la posible dimensión militar de su programa nuclear.

En un discurso ante la Junta de Gobernadores de la AIEA, Amano destacó que, tras años de análisis, sus expertos consideran que las informaciones recibidas sobre estas supuestas actividades son «fiables y consistentes».

«La información (recibida desde una decena de países) indica que Irán ha llevado a cabo actividades relevantes para el desarrollo de un artefacto explosivo nuclear», dijo.

«Pido a Irán que entable contactos sustanciales con la AIEA sin atrasos y que provea las aclaraciones exigidas sobre las posibles dimensiones militares de su programa nuclear», agregó.

Los gobiernos de Rusia y China criticaron este informe por considerar que se basa en «especulaciones», en referencia a las informaciones entregadas a la agencia por los servicios de inteligencia de una decena de países.

Ayer, Amano defendió la metodología del informe que, en su opinión, «nos da una imagen más plena sobre el programa nuclear iraní y que aumenta nuestras preocupaciones sobre posibles dimensiones militares».

«Preocupación»

La Junta de Gobernadores, reunida entre ayer y hoy para deliberar sobre el programa nuclear iraní, tiene previsto adoptar una resolución que condene a la República Islámica por sus actividades.

El borrador de la resolución expresa «una profunda y creciente preocupación» con Irán, aunque no cita ninguna una nueva denuncia ante el Consejo de Seguridad de la ONU, donde el caso iraní ya se trata desde 2006.

Las seis principales potencias de la Junta -Estados Unidos, Rusia, China, Gran Bretaña, Alemania y el Estado francés- se han puesto de acuerdo sobre este texto, que para algunos diplomáticos es sólo un «acto simbólico» sin consecuencias legales.