Erdogan al presidente sirio al-Assad: «Llegará el día en que tengas que irte»
El primer ministro turco, Recep Tayip Erdogan, auguró a su otrora amigo personal y presidente sirio, Bashar al-Assad, que sus días están contados. A tono con esta advertencia, los analistas dan por hecho que Ankara establecerá una zona tapón en su frontera común.
GARA | ANKARA-DAMASCO
Por primera vez desde el inicio en marzo de la revuelta contra el régimen del presidente sirio, Bashar al-Assad, el primer ministro turco, Recep Tayip Erdogan, afirmó ayer que sus días estarían contados.
«Llegará el día en que tú también tengas que irte», advirtió Erdogan a quien hasta hace meses tenía por amigo personal.
Mientras tanto, los analistas hablan ya abiertamente de la posibilidad de que Turquía instaure una zona tapón en su frontera con Siria. El comentarista Murat Yetkin, del diario «Radikal», lo da por hecho y lo justifica por razones humanitarias. Las mismas que enarbola Ankara, que insiste en que el objetivo sería evitar un flujo masivo de civiles huyendo de los operativos del Ejército sirio.
Robert Fisk, insigne reportero del diario británico «The Independent», se hace eco del temor de Damasco de que el establecimiento de dicha zona tapón «busque transformarlas en refugio de la resistencia» armada.
Mientras Sedat Ergin, editorialista de «Hurriyet» da por hecha la caída del régimen sirio y añade que «cuanto antes se derrumbe, mejor para Turquía», analistas militares turcos como Armagan Kuloglu denuncian «exceso de celo» de Ankara y le acusan de incitar a Damasco a jugar la «carta kurda», justo cuando el PKK lidera una ofensiva armada que retrotrae 30 años el conflicto armado en torno a Kurdistán Norte.
En 1998, Turquía acusó a Siria de dar alas al PKK y amenazó con una guerra total a Damasco.
Coincidiendo con esta tensión, cuatro peregrinos turcos resultaron heridos en un tiroteo contra el autobús en el que viajaban. No estaba claro si el ataque fue obra de soldados sirios o de «hombres armados».
La oposición denunció la muerte de cuatro civiles en un operativo militar en Homs. La agencia oficial Sanaa los identificó como «terroristas» e informó de secuestros y tiroteos contra una ambulancia a cargo de grupos de hombres armados