El Órgano de Coordinación Tributaria celebró ayer una nueva reunión en la que participaron responsables de las haciendas de las tres instituciones forales y del Gobierno de Gasteiz, para estudiar los proyectos de Norma del Impuesto sobre el Patrimonio y de Medidas Tributarias presentados por la Diputación Foral de Gipuzkoa.

Sin embargo, las diputaciones de Bizkaia y Araba presentaron, fuera del orden del día, sus propios proyectos de norma y anunciaron que sus respectivos consejos de diputados aprobarán las propuestas entre hoy y mañana. Ante esta situación, el Gobierno de Gasteiz planteó proseguir el jueves con las reuniones «en aras a cumplir con su objetivo de armonización fiscal», teniendo en cuenta además que para su aprobación definitiva dependen del visto bueno de las Juntas Generales.

Impuesto de Patrimonio

Por ahora, las tres instituciones forales coinciden en la necesidad de recuperar el Impuesto de Patrimonio para 2011 y 2012, aunque Araba y Bizkaia pretenden que el importe exento por vivienda habitual se eleve hasta los 400.000 euros y, en general, haya un mínimo exento de hasta 800.000 euros.

Gipuzkoa rebaja esos mínimos y propone que el importe exento por vivienda habitual sea hasta 300.000 euros y el mínimo total hasta 600.000 euros.

No obstante, Gipuzkoa podría aceptar finalmente los mínimos propuestos por Araba y Bizkaia, con el fin de lograr una armonización. Según fuentes de la Diputación de Gipuzkoa, a pesar de las discrepancias existentes «se han acercado un poco posturas», por lo que espera seguir negociando en los próximos días y confía en que finalmente se pueda lograr un acuerdo.

Según el Ejecutivo de Patxi López, también en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones hubo «cierto acercamiento» y se podría implantar un tipo del 1,5%.

Mayores diferencias se evidenciaron en la tributación del ahorro, ya que Araba y Bizkaia defienden que se mantenga la actual presión fiscal del 20% hasta los 10.000 euros y a partir de esa cantidad, subirla hasta el 22%.

Gipuzkoa, sin embargo, pretende establecer un nuevo tipo para la tasa de ahorro que mantenga el 20% actual sólo hasta los 1.500 euros y elevarlo al 24% a partir de esa cantidad.

Además de estas medidas, las dos diputaciones, sin el concurso de la guipuzcoana, acordaron otra serie de actuaciones de apoyo a las familias, con una nueva deducción de 50 euros anuales para los hijos, algo que no suscribe Gipuzkoa.

El acuerdo de Araba y Bizkaia contempla además incrementar las cantidades deducibles para la creación de puestos de trabajo de 4.600 a 4.900 euros en los supuestos generales, y de 4.000 a 4.300 para la contratación de colectivos con dificultades.

Respecto al Impuesto de la Renta de las Personas Físicas (IRPF), Araba y Bizkaia actualizarán un 2% las deducciones personales y familiares para corregir los efectos de la inflación.

La lucha contra el fraude fiscal puso de manifiesto asimismo las diferencias, ya que el Gobierno de Lakua propuso constituir un grupo de trabajo sobre este asunto, idea que Gipuzkoa apoya pero no Bizkaia ni Araba.

Este grupo de trabajo elevaría sus conclusiones, a principios de 2012, sobre medidas a incluir en un plan de colaboración interinstitucional en la lucha contra el fraude fiscal.