GARA > Idatzia > Iritzia> De reojo

Raimundo Fitero

Funcional

 

La publicidad ha vuelto a “La Noria”, de manera pausada, por goteo y tras un acto de arrepentimiento de Paolo Vasile que debería alzarse a modélico, tanto en el ámbito católico, como en el empresarial. También debería ganarse algún premio en la Escuela Universal del Cinismo. Pero ha tenido sus efectos deseados. Y, hasta la fecha, después de reconocer el error, no hay culpables, es decir no ha despachado a nadie del equipo de producción, redacción, presentación o dirección. Asume el error de entrevistar pagando a la madre de un reo, pero más error sería enrocarse y perder anunciantes.
Con estos puentes tan prolongados, la verdad es que las programaciones televisivas se resienten en cuanto se sabe que siempre que hay movilidad de la ciudadanía desciende el consumo televisivo, o al menos desciende el número de los telespectadores más consumistas, ya que son los que están moviéndose de un lugar a otro, en busca de un regalo o un número de lotería, que hay que ver las colas que se forman en ciertos puntos de venta. Cuanta más crisis, más búsquedas de soluciones milagrosas, de dejar el futuro en manos de la Suerte, pero previo pago e incremento de las arcas del estado. La publicidad del ente público es algo engañosa, porque han incrementado la dotación del premio, pero meterán muchísimos más números en los bombos, por lo que será más difícil estadístcamente, salir bebiendo cava en la tele.
Con las puertas abiertas de un parlamento en funciones, con el cuñado y el suegro de Urdangarin dando mala imagen a una contienda tenística de bajo nivel, colocar varias horas a la comunicadora María del Monte en una butaca para hablar y hablar de asuntos personales, es un pellizco en las conexiones neuronales, porque el problema básico es crear un territorio infame en donde los asuntos privados de famosos o aspirantes sean el campo de experimentación social. De tal manera que esa manera de tratar una realidad menor, artificiosa, sea trasladada como norma, al mundo del deporte, la cultura o la política. Esa contaminación basada en buscar audiencias con métodos amarillentos, en todos los géneros, es lo que se lleva, lo más funcional. Y eso es un peligro grandísimo.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo