El fútbol británico siguió llorando este pasado fin de semana en memoria del malogrado técnico galés Gary Speed. Unas lágrimas que para nada restaron claridad al juego del líder, el Manchester City, que arrolló 5-1 al ascendido Norwich, y que ya ha anunciado las salidas de Anelka y Alex en Navidades. Tras él sigue, con más apuros y el esguince de Chicharito, su vecino el United, y la noticia es que ambos se enfrentarán a principios de enero en la Copa inglesa.

Al acecho de ambos, las urracas del Newcastle, que cedieron 0-3 ante el Chelsea de Andres Villas-Boas o ABB (`ei-bi-bi', como ya le conocen en las islas) y el Arsenal de Robin van Persie o RvP, que con su gol en Champions este martes suma ya 42 en todo 2011, sólo por detrás de Messi y Ronaldo. Ganaron 0-4 y la guinda la puso Gervinho, finalizando una secuencia colectiva de 33 pases seguidos, diez más que el anterior récord de esta temporada en la Premier. Por cierto, los gunners pusieron, asimismo, fin con el tanto del central Vermaelen, a una increíble serie de 179 córners seguidos sin marcar.

Emotividad también y mucha la hubo en el fútbol brasileño. Nos dejó Sócrates Brasileiro Sampaio de Sousa Vieira de Oliveira, el Doctor, del que semanas atrás hablábamos sobre sus graves problemas de salud. Y lo hizo, a los 57 años, el día en que su equipo de siempre, el Corinthians, se alzaba en un Pacaembú enloquecido con el título del Brasileirao en la última jornada. Ídolo de la hinchada, se guardó un minuto de silencio en el que los jugadores del Timao se mantuvieron con el puño en alto, imitando el característico gesto luchador con el que él entraba siempre al campo. ``Ganar o perder, pero siempre con democracia'' rezaba una de sus míticas camisetas grabadas con las que jugaba.

La Fiorentina, donde militó una temporada, también guardó un minuto de silencio en su partido ante la Roma -en el que fue expulsado por primera vez en su trayectoria, Bojan Krkic-. ``El Dottore viaja hacia el Cielo para hacer un taconazo a Dios'', se leía en una de las pancartas en su recuerdo situada en la Curva Fiesole, lugar donde se sientan los tifosi viola. ``Ciao Sócrates'' se leía en la pantalla del estadio. «No hay que jugar para ganar, sino para que no te olviden», dijo no hace mucho al recordar la `tragedia' de Sarriá en el Mundial´82, cuando aquella legendaria Brasil de los Junior, Serginho, Zico, Eder, Falcao, Cerezo se ganó un lugar en la histria pese a caer ante la Italia campeona de Zoff y Rossi. El fútbol siempre le recordará.

Di Natale, el «capocannoniere»

No es el Corinthias del Príncipe Adriano el único nuevo campeón. El Kashiwa Reysol se convirtió en el nuevo rey de la liga japonesa de fútbol y en el primer club en los 19 años de historia de la Japan League que consigue ceñirse la corona en su temporada de debut en la máxima categoría. Pero si un título ha trascendido más allá de sus fronteras es el cosechado, ante más de 50.000 espectadores, en la mítica Bombonera, por el Boca Juniors. Después de tres años de sequía y una racha de 27 partidos invictos, los bosteros alcanzan de nuevo la gloria guiados por Juan Román Riquelme en su partido 600 como profesional.

También otro histórico, el Nacional de Montevideo, se proclamó campeón uruguayo en el vetusto Estadio Centenario, con nuevo gol del Chino Recoba.

Mucho más les queda aún a las ligas europeas, cuyos lideratos están muy ajustados. Es el caso de la Ligue 1 francesa, donde el Montpellier no cede ante el empuje del PSG, que volvió a ganar y para quien ya suena Rafa Benítez en el banquillo. Pero si hay un nombre propio ése es el del goleador Olivier Giroud, del líder, que el sábado no sólo marcó sino que dio tres asistencias, tanto que el periódico ``L´Equipe'' le otorgó un `9' en la puntuación personal, algo casi imposible de lograr. Alabanzas también para el Olympique de Marsella, clasificado en Champions, en el que Jordan y André Ayew volvieron a ser los artífices de la victoria con sus goles. El conjunto provenzal confirma así su mejora a través de un hermoso guiño a la época gloriosa de Abedi Pelé, el padre de los dos protagonistas. Por cierto, el 2-3 del Marsella en Champions se ha llegado a pagar en las apuestas a 1.000 euros.

En el Calcio, el Juventus sigue firme y tercero marcha el sorprendente Udinesse, que pese a perder este año a figuras como el azulgrana Alexis Sánchez y otros, sigue fuerte liderado por el incombustible napolitano Antonio Toto Di Natale, que en el valioso triunfo 0-1 en casa del Inter -donde Zanetti fue expulsado por segunda vez en su carrera, tras más de mil partidos-, disputó su encuentro número 300 de la Serie A, aunque al fallar un penalti desperdició la ocasión de marcar su diana 140 en la élite del fútbol italiano y exteriorizar su típico `avión', festejo que el capocannoniere realiza tras cada gol y que su esposa Ylenia le reprocha que nunca le ha dedicado uno a ella ni a sus hijos... eso y que nunca les cambió un pañal. «No era mi tipo, pero me ganó con su simpatía y su acento napolitano», ha confesado su esposa, con la que se casó hace 14 años.

Casados con el liderato quieren seguir los de Bayern de Munich, que lo recuperaron tras ganar 4-1 al cuarto, el Werden Bremen, y empatar el Borussia Dortmund en su duelo con el otro Borussia, el de Moenchengladbach, que es tercero.

Quien perdió aunque sigue primero es el AZ Alkamar holandés, que cayó con estrépito, 5-1. Fue un fin de semana prolífico en la Eredivise, en el que se anotaron 44 goles, destacando que el Heracles goleó por 7-0 al VVV-Venlo y el Twente hizo lo propio ante el Utrecht por 2-6.

Y a modo de curiosidad, nos fijamos en la liga de Azerbayán, donde sigue líder el Khazar Lankaran, equipo en el que juega el canterano de La Masía Mario Rosas, el bueno de la generación de 1980, la misma que Xavi Hernández. Tras pasar por el Salamanca, se ha ido a un país futbolísticamente desconocido. Como Marc Crosas, aquel joven talento azulgrana que hizo debutar Cruyff, terminó en el Celtic de Glasgow y que hoy juega en el Volga ruso.