Las bolsas vivieron ayer una sesión con dos partes diferenciadas. Por la mañana, tras digerirse el aviso de S&P sobre una posible rebaja de la nota crediticia a casi toda Europa, los inversores comenzaban alargando la racha de compras. Más tarde, sin embargo, regresaban las cautelas a la espera del desenlace del encuentro europeo de mañana. Por ahora, los analistas apuestan por una aprobación rotunda de las tesis del tándem Merkel-Sarkozy, lo que devolvería la tranquilidad a los mercados y abre la posibilidad de nuevas subidas a lo largo de la próxima semana. Al cierre, todos los índices europeos plegaban velas y se imponía el rojo. El Ibex cedió un 0,79%, hasta los 8.644,30 puntos. En el resto de Europa las bajadas tampoco fueron significativas. París descontó un 0,11%, Londres, un 0,39%, y Fráncfort, un 0,57%. Los valores más castigados dentro del Ibex fueron Sacyr (-2,59%), Gamesa (-2,08%) y BBVA (-2%). Ninguno de los grandes pudo sostenerse en zona de ganancias. Destacaron los retrocesos de Telefónica (-1,35%) y Repsol (-1%). En el lado de las subidas, despuntaron BME (+1,65%), Mediaset (+1,16%) y Sabadell (+1,07%). El banco fue suspendido de cotización poco antes del cierre tras saberse que le había sido adjudicada la CAM por un 1 euro. En este sentido, la EBA (Autoridad Bancaria Europea) publicará hoy los requisitos de capital de cada entidad. En París, las alzas más notables correspondieron a Alcatel-Lucent (+3,15%) y Essilor (+2,69%), mientras que Peugeot (-3,59%) era el más penalizado de la sesión. Todos los bancos, con Crédit Agricole (-1,76%) a la cabeza, terminaron a la baja.