Una trayectoria exitosa en la Europa League, el buen arranque copero, algunas actuaciones sensacionales... El bosque del Athletic se ha teñido de los más evocadores colores otoñales. Pero los bilbainos corren el peligro de incurrir en el error inverso al habitual y, despistados en la espesura, no fijarse en los árboles que la componen.

Árboles que llegan de Granada, habitan en Mallorca o, en el caso de esta tarde, viajan desde Santander. Árboles que, si no se dominan, pueden dejar el bosque tan repleto de claros que acabe por parecer otra cosa. Es el peligro que, al menos en Liga, corren ahora mismo los rojiblancos. Porque en los cinco últimos encuentros han encajado una sola derrota -precisamente en su última comparecencia en San Mamés-, pero tampoco han sido capaces de ganar más de un partido. Y eso provoca que la brecha con los puestos cabeceros empiece a ampliarse en vísperas de que la clasificación empiece a determinar las batallas en las que, salvo vuelco o descalabro considerable y poco habitual, peleará cada equipo hasta final de temporada.

En definitiva, que el Athletic quiere y necesita sumar los tres puntos. Deseo y necesidad que se multiplica en el caso de su rival por mucho que el Racing llegue a San Mamés, al contrario de su anfitrión, con una victoria a sus espaldas. Pero es que los verdiblancos -que a su precaria situación deportiva unen una crisis institucional que amenaza incluso la supervivencia del club- necesitan unas cuantas para poder empezar a respirar. Y ya se sabe que el equipo cántabro, por mucho que no haya sumado un solo punto en sus tres últimas visitas a la Catedral, tiene cierta afición a propinar disgustos al aficionado rojiblanco. Por no hablar de la afición, igualmente desterrable, que parece haber adquirido el propio Athletic de echar cables a equipos modestos y en apuros.

Llorente, Toquero, Ibai

Hay otros hábitos que también levantan controversia. Como el de Marcelo Bielsa, que se aferra a sus hombres de confianza por mucho que apriete el calendario. Es el caso ahora mismo. El equipo atraviesa su tercer maratón de la temporada -el de hoy es el quinto encuentro en quince días y todavía disputará otros tres hasta el próximo miércoles 21-, pero por tercer partido consecutivo el técnico alineará la misma formación inicial. Eso quiere decir que Gaizka Toquero volverá a ejercer de delantero porque Fernando Llorente volverá a seguir el encuentro desde la grada. El bombardero rojiblanco, que tampoco pudo entrenar ayer, no acaba de superar las molestias en la rodilla izquierda que le han impedido participar en los dos últimos encuentros, así que ni siquiera ha entrado en la convocatoria.

Sí lo ha hecho, para sorpresa de muchos, Ibai Gómez. Vale que el Athletic ande un tanto corto de efectivos en punta de ataque, pero es que el futbolista disputó ayer al completo el derbi que enfrentó a Amorebieta y Bilbao Athletic en Urritxe. Un encuentro que, por cierto, se caracterizó por su intensidad. Pese a ello, hoy se sentará en el banquillo y quién sabe si incluso disputará algunos minutos. Además de Ibai, también Borja Ekiza se une a la convocatoria que, por lo demás, es calcada a la que Bielsa se llevó a Oviedo -entonces fueron 16, al tratarse de una cita copera-.

También repetirá equipo, por primera vez esta temporada, el Racing, una vez que Bernardo y Arana han superado los problemas físicos que arrastraban desde la última jonrada. Si finalmente no se encontraran al cien por cien, será Christian quien actúe en el centro de la defensa, mientras, en el centro del campo, Munitis pasaría a la banda derecha y Serrano recuperaría la titularidad en la izquierda.