PONFERRADINA 1

Derrota triplemente dolorosa para el Alavés. Los albiazules vieron, por un lado, rota la buena racha que mantenían desde la llegada de Granero al banquillo. Vieron, por otro, volar tres puntos al bolsillo de un rival directo. Y precisamente por eso, por último, dejaron escapar la posibilidad de propinar -se lo llevaron, de hecho- uno de esos golpes de efecto ante un equipo con el que teóricamente, pelearán codo con codo hasta el final.

Lo peor es que, además, hay poco a lo que aferrarse. Porque la Ponferradina fue mejor y porque el equipo gasteiztarra ni siquiera fue capaz de aprovechar la inferioridad numérica del rival durante media hora larga.

No es que los bercianos barriesen. Es que dieron la sensación de controlar en cada momento lo que requería el partido y cómo hacerle frente. En un primer tiempo más igualado derrocharon intensidad -en ese aspecto, al menos, no ganaron- y aprovecharon su oportunidad. Concretamente, un error babazorro que Mayor resolvió de manera magistral ante la salida de Rangel. El gol no le sentó bien al Alavés, incapaz de inquietar a su rival con un amago de reacción.

Sí la tuvo en el segundo tiempo, pero le sirvió de poco. Primero no acertó -Jito envió alta una gran asistencia de Sendoa-, aunque afortunadamente tampoco lo hizo a la contra la Ponferradina, a la que le anularon un gol de Mayor. Pareció mejorar el panorama, cuando el goleador berciano vio la segunda amarilla y Granero contratacó con la entrada al verde de un segundo punta. De poco sirvió. El equipo de Claudio Barragán cerró filas y al Alavés, incapaz de desbordar por las bandas o de combinar por el centro, no le quedó otra que apostar por los balones largos y bombeados. Les fue mejor a los visitantes, que incluso rozaron la sentencia, a dos minutos del final, aunque Yuri, solo ante el portero, remató desviado el cuero.

Triunfo del Amorebieta

Un solo puesto por debajo de la Ponferradina se queda el Amorebieta, tras imponerse ayer al Bilbao Athletic (2-1). Larreategi adelantó a los azules nada más comenzar el choque, Orbegozo empató a los diez minutos de la reanudación y Arman sentenció el choque del lado local a un cuarto de hora del final.

El Sanse, por su parte, prolonga a once las jornadas consecutivas sin ganar, en las que sólo ha sumado tres puntos. Ayer encajó su quinta derrota consecutiva frente a la Gimnástica (0-2).

Casares

Por su movilidad y porque todas las acciones de peligro de los albiazules pasaron por él. En la reanudación quizá se vio algo difuminado por el acoso defensivo visitante.