Empleados públicos navarros exigen recuperar los salarios y el empleo
Los sindicatos de la administración pública navarra UGT, CCOO, ELA, LAB, STEE-EILAS, SPA, SBN y STAJ aseguraron ayer que no firmarán un convenio que no prevea «el mantenimiento y la recuperación del poder adquisitivo y del empleo perdidos hasta 2010». Tras acusar al Ejecutivo de reducir plantillas, privatizar servicios y restringir inversiones, denuncian además que pretende que los sindicatos le den «un cheque en blanco».
GARA | IRUÑEA
Los sindicatos de la administración pública navarra convocaron ayer una asamblea para informar sobre la situación de la negociación colectiva, en la que acusaron al Gobierno de Nafarroa de destruir empleo y empeorar la calidad de los servicios públicos mientras aprueba «una subida de hasta el 33%» de sus sueldos y el de otros altos cargos.
Los funcionarios denunciaron también la «reducción de plantillas», la «privatización» de servicios y la supresión de «cientos de plazas» pendientes de oposición, lo que «impide» que se pueda reducir la temporalidad, que cifran en el 30%.
«En un momento de crisis aguda como el que padecemos, el Gobierno de Navarra elude sus responsabilidades: no crea empleo, lo destruye; no favorece la cohesión social, sino que la dificulta con privatizaciones o ajustes de plantillas; y no facilita la reactivación económica sino que restringe inversiones», señalan en un comunicado.
En él aventuran además «una nueva congelación salarial» que situará los sueldos de los empleados públicos en niveles de 2006, mientras 7.500 trabajadores siguen siendo eventuales, «uno de cada tres», así como el traslado a Nafarroa de otras medidas y recortes que pueda aprobar el Gobierno de Rajoy. Con todo ello, en opinión de los empleados públicos, lo que el Gobierno foral les plantea en la negociación del convenio es que le den «un cheque en blanco» ya que sus posturas de inicio «son tan restrictivas que imposibilitan la negociación».
Una situación que entienden que tiene «una única respuesta» que pasa por las movilizaciones. El Gobierno «sin presión, seguirá adelante con sus planes», aseguran los sindicatos de la función pública, que tienen previstas nuevas asambleas para mañana y el 20 saldrán a la calle en Iruñea para reclamar unos servicios públicos de calidad.
Petición de STEE-EILAS
Por su parte, el sindicato STEE-EILAS exigió ayer a los gobiernos de Iruñea y Lakua la retirada de sus proyectos de presupuestos y pidió que se elaboren otras cuentas públicas «en base a criterios sociales y no economicistas», ya que ambos «quieren imponer duros recortes en el área de educación. La educación no es un gasto, sino una inversión para el desarrollo social», insistió.
Miembros del sindicato se concentraron frente al Parlamento de Gasteiz para denunciar que ambos ejecutivos «quieren hacer desaparecer de un plumazo» los derechos sociales y laborales, «utilizando el pretexto falaz de reducir la deuda pública y reactivar la economía».
Los sindicatos aventuran «una nueva congelación salarial» que situará los sueldos de los empleados públicos en niveles de 2006, mientras 7.500 trabajadores siguen siendo eventuales, «uno de cada tres».
Miembros del sindicato STEE-EILAS se concentraron frente al Parlamento de Gasteiz para denunciar que los ejecutivos de Iruñea y Lakua «quieren hacer desaparecer de un plumazo» los derechos sociales y laborales.
Trabajadoras del sector de limpiezas de edificios y locales del Gobierno navarro se concentraron ayer frente a Palacio de Nafarroa contra los recortes que, según denunciaron, supondrán una «pérdida notable» de empleo y un «deterioro» de la calidad del servicio.
De hecho, según señaló a la agencia Efe Carmen Nagore, de CCOO, sindicato convocante de la protesta junto con UGT, LAB y ELA, algunas trabajadoras ya han comenzado a recibir cartas de despido.
En un escrito firmado por los cuatro sindicatos que se repartió ayer, se recuerda que los recortes en los presupuestos de limpieza llegan al 20% en el Consistorio de Iruñea y al 40% en el Gobierno navarro, lo que «empeorará» sus «ya de por sí precarias condiciones de trabajo».
«A día de hoy se nos exige calidad, rapidez y eficacia en nuestra actividad, obviándose que es materialmente imposible que se desarrolle el mismo trabajo con menos personal y menos horas, salvo que se haga a costa de nuestra salud», se quejan los sindicatos, al tiempo que denuncian que los políticos «hablan de austeridad» mientras «se incrementan sus retribuciones». GARA