La frase la soltó la parlamentaria del PSOE Joana Madrigal en la junta de portavoces que ayer por la tarde fijó el orden del día del pleno en el que, este viernes, el Parlamento de Gasteiz aprobará los presupuestos de 2012. Madrigal respondía así a la batería de acusaciones, en forma de enmiendas, formuladas por los representantes de EA, Aralar y PNV a unos presupuestos que la propia parlamentaria reconocía que, en el caso de Cultura, son «brutales y esperamos que sean coyunturales», aunque «el mundo del euskara no tiene ninguna bula que le impida ser solidario -avisó-. El Gobierno Vasco piensa que se puede hacer más con menos». Eso sí, aunque sean malos, comparándolos con los del 2006 -se tuvo que retrotraer hasta ese año-, los del 2012 gastan más en cultura.

Lo cierto es que, si los presupuestos en materia de Euskara, Cultura y Juventud venían ya bastante menguados, con los acuerdos adoptados por el PSOE y el PP, con el apoyo de UPyD en algunas enmiendas, lo que irá a pleno es una reducción importante en el apoyo a la normalización del euskara -a las, según Gorka Maneiro (UPyD), «ingentes cantidades para impulsar el euskara»-. Se ha quitado, incluso, una ayuda tan básica a la euskaldunización como era el pago de parte de la matrícula a quienes aprobasen un curso de euskara, como denunciaba Mikel Basabe (Aralar), pero es que tampoco aparece partida alguna destinada a Kontseilua, Seaska, la financiación de las televisiones locales en euskara, a los medios de comunicación en general -parece que se les deben todavía las partidas del 2011, según denunció Basabe- o las ayudas al sector privado, como denunciaba Juanjo Agirrezabala (EA). La portavoz del PNV Jone Berriozabal afirmaba gráficamente que «el euskara no necesita bula alguna, pero tampoco burlas».

Cinco fueron los puntos esenciales de las enmiendas de la oposición: las críticas a la reducción de las aportaciones al Consejo de la Juventud -a instancias del PP, aún se ha reducido más su partida; una «venganza» en toda regla, según Aralar-, lo que puede desencadenar en su desaparición; la creación de una partida de casi 200.000 euros para que la Vuelta a España salga de Euskal Herria -«y, por contra, los equipos ciclistas de aquí no reciben ni un céntimo», denunció Berriozabal-; la reducción de ayudas al euskara y el aumento a la producción en castellano; el hecho de que no se mueva un dedo para evitar que EITB deje de verse en Nafarroa con la desaparición de la señal analógica en 2012; y la partida destinada a una Fundación 2012 de nueva creación que Blanca Urgell anunciaba el lunes con el objetivo de llevar a cabo el Año de las Culturas y la Paz.