«Un gol es un pase a la red», filosofaba el técnico argentino César Luis Menotti. Pues 46 son los pases al fondo de las mallas que sitúan al letón Aleksandrs Cekulajevs al frente de la clasificación de la Bota de Oro. Sí, ni Messi, ni Ronaldo, ni Rooney, ni Mario Gómez, ni... La UEFA ha actualizado este ránking tras los progresos del delantero madridista, que el pasado fin de semana ante el Sevilla volvió a materializar un nuevo triplete, su quinto esta temporada -por cierto, otro exmerengue, Raúl, hizo lo propio con su Schalke, que ya es tercero en la Bundesliga- y suma ya 20 tantos en la competición doméstica. Con estos goles se acerca un poco más a su objetivo de volver a llevarse este trofeo, que la pasada temporada lideró con 40 goles.

Esta suma de 20 anotaciones colocan al atacante portugués por delante de Lionel Messi y de la estrella de la Liga rusa Seydou Doumbia, y le ponen a solo seis puntos del delantero del JK Trans Narva, que ha disfrutado de un año sensacional. El jugador acabó la Liga estonia (que terminó a principios de noviembre) con 46 goles en 35 partidos, récord del campeonato.

Pero ¿quién es este `pichichi' europeo de apellido Cekulajevs? Se trata de un letón de 25 años, nacido en Riga, que comenzó su carrera profesional en su ciudad natal con ya 21 años. Sin embargo, no cuajó y fichó por un Segunda División del país, donde anotó 51 goles en 30 encuentros.

Poco después recaló en la Tercera División de la República Checa, antes de regresar en 2009 al Jurmala letón, en el que ya había jugado. Un año más tarde, volvió a hacer las maletas para viajar a Islandia y enrolarse en el Vikingur, para esta temporada emigrar de nuevo, ahora al Trans Nava estonio, donde se ha hinchado a meter goles, hasta 46. Encabezar la tabla de la Bota de Oro le ha abierto alguna puerta, y en noviembre fue invitado a probar por el Duisburgo de la Segunda alemana.

No parece difícil que Cristiano Ronaldo le desbanque, ya que en la clasificación cuentan los goles, pero también el coeficiente que la UEFA adjudica a cada Liga, y así, en la española, cada tanto vale dos puntos y, por ejemplo, en la estonia, uno: el portugués está a seis puntos -40- del letón. Y por detrás de ambos se sitúan el marfileño del CSKA Moscú Seydou Doumbia, con 24 tantos y 36 puntos -cada uno vale 1,5 puntos-; Lionel Messi, con 17 goles y 34 puntos; Mario Gómez, del Bayern, con 16 goles y 32 puntos; y un listado de jugadores como Klaas-Jan Huntelaar, Robin van Persie, el incombustible Lukas Podolski, Artjoms Rudnevs, del Lech Poznan polaco...

Quien parece que ratifica su regreso a los goles y quiere pelea es Wayne Rooney, que solo tardó 52 segundos de partido para hacerle el primero al QPR, lograr su duodécimo gol -tras el doblete de la semana anterior- y romper del todo una racha de diez jornadas de Premier sin marcar. Peor lo está pasando en la Liga inglesa otro ariete, y no porque no dé `pases a la red', sino porque acaba de ser sancionado con ocho partidos por insultos racistas al defensor del ManU Patrice Evra. Hablamos del uruguayo Luisito Suárez.

Trezeguet, al River Plate

No se encuentra entre los máximos artilleros europeos, relegado al banquillo del Málaga, el holandés Rudd Van Nistelroy, que, no obstante, ha sido designado hace pocas fechas por la IFFHS (Federación Internacional de Historia y Estadísticas del Fútbol) como el máximo goleador del mundo de la primera década del siglo (2001-2010).

El tulipán sumó 86 tantos, uno más que el francés Thierry Henry -al que el Arsenal le ha homenajeado con una escultura junto al Emirate Stadium por sus 226 goles con los gunners-, y cierra el podio el marfileño del Chelsea Didier Drogba con 83. El eterno alemán Miroslav Klose (81) y el camerunés Samuel Eto'o (79) les siguen en esta distinguida tabla. Messi está en el puesto 34 de la lista y un poco antes, en el 31, se sitúa el francés David Trezeguet Trezegol, de 34 años, al que vimos la pasada temporada en el Hércules y cuyos últimos goles los había hecho en el Baniyas SC de los Emiratos Árabes. Acaba de firmar por los millonarios del River Plate, cumpliendo un sueño dada su descendencia argentina.

El América de Cali, al hoyo

Un River Plate que descendió a la Segunda División por primera vez en su historia, algo que le acaba de pasar a otro clásico que nunca había bajado, el América de Cali colombiano, trece veces campeón de su país y en cuatro ocasiones finalista de la Copa Libertadores. Una trayectoria a la baja, salpicada por una crisis económica del club, todo lo contrario que el Liga de Quito, el subcampeón de la Copa Sudamericana, que se ha convertido en el nuevo rico del fútbol del Cono Sur, con presupuestos solo comparables a los que ahora mismo se manejan en Brasil.

Eso sí, los ecuatorianos no pudieron vencer en la final al Universidad de Chile, el nuevo rey sudamericano que dirige el Bielsita Jorge Sampaoli, que este fin de semana ganó también el `clásico universitario' al Universidad Católica, pero que perderá, como siempre pasa, a su nueva estrella, el delantero Eduardo Vargas, fichado por el Nápoles de Cavani y Lavezzi para este mercado de invierno.