Euroliga
Jackson frente a su espejo
El base de Bilbao Basket se mide a Bo McCalebb, al que considera «el mejor base americano en Europa».
SIENA-BILBAO B.
Jon ORMAZABAL
Enfocar un partido ante un equipo como el toscano, asiduo a las últimas Final Fours, dominador en los últimos años de la Lega, de la que es el actual líder, y que cuenta con gente de la calidad y la experiencia de Igor Rakocevic, Thornton, Stonerook y un entrenador tan codiciado como Pianigiani, a un duelo individual puede parecer superfluo. Pero por el peso que los bases tienen en el juego de sus respectivos conjuntos, el mano a mano entre Bo McCalebb y Aaron Jackson es uno de los principales atractivos del debut del Bilbao Basket en el Top 16.
Nadie duda de que la eclosión del base de Hartford ha sido una de las claves en el crecimiento del conjunto de Miribilla y que, cuando el eléctrico base de Bilbao Basket puede correr y moverse con libertad, los engranajes del equipo de Katsikaris son mucho más fluidos. Esta tarde, sin embargo, se medirá a uno de los rivales más cualificados en su posición, un Bo McCalebb que se ha convertido en un referente para todos los jugadores estadounidenses que juegan en el viejo continente.
«Es un jugador en el que puede considerarse como el reflejo de mis expectativas. Es el mejor base americano de Europa. Jugar contra él es una forma de ver cuál es mi auténtico nivel respecto a él, tanto en el aspecto individual como en el colectivo», señaló Jackson horas antes de viajar a Siena.
Orgullo de Macedonia
Existe una relativa unanimidad en torno a la aseveración del base bilbaino, y esta sería rotunda si la pregunta la hiciéramos en Macedonia, donde este base nacido en Nueva Orleans es su nuevo héroe nacional. Tras buscar en Serbia y en Montenegro ese pasaporte europeo que apuntalase su caché en Europa, Macedonia le concedió en apenas 48 ese visado que suele costar entre tres y seis meses a aquellos que cuentan con raíces en el país balcánico.
Como su juego sobre la cancha, desde entonces todo ido a la velocidad del rayo para este base que de la Universidad de Nueva Orleans dio el salto al Mershin turco, de allí pasó al Partizan y cumple su segunda temporada en Siena. McCalebb consumó este matrimonio de conveniencia con Macedonia llevando a su selección a las cotas más altas de su historia en el pasado Eurobasket de Lituania y como recompensa recibió recientemente el premio al mejor atleta del país en 2011.
La perfecta combinación de rapidez, talento, capacidad atlética y sus penetraciones, al margen de su fina muñeca, también le han llevado a ser la gran referencia de un equipo como el toscano, uno de los más regulares del continente.
No obstante, Bilbao Basket deberá hacer bastante más que frenar al macedonio si quiere ganar hoy en Siena. Los italianos presentan un equipo muy equilibrado con la veteranía y la pólvora exterior de Zisis, Bootsy Thornton e Igor Rakocevic -Kaukenas está lesionado-. Por dentro, el peso recae en David Andersen y en la clásica pareja Lavrinovic -duda para hoy- y Stonerook. El joven Aradori ofrece grandes relevos.
Los dos bases destacan por su explosividad, su capacidad atlética y sus penetraciones, por lo que se puede ver un duelo de alto voltaje.
Montepaschi es mucho más que su base y acumulan gran experiencia en Europa con jugadores como Zisis, Rakocevic, Thornton, Lavrinovic, Andersen o Stonerook.
Aunque las victorias en Gasteiz y en Estambul dentro de la fase regular de la Euroliga fueron de gran calado, Fotis Katsikaris reconoció ayer que romper el gafe lejos de Miribilla en Zaragoza le ha venido muy bien al equipo para afrontar el Top 16 con garantías.
«Necesitábamos ganar fuera, lo conseguimos la semana pasada y eso ayuda mucho en el tema de confianza. El equipo ha trabajado muy bien y estamos en buen momento para una semana complicada, con dos partidos fuera de Miribilla. Será difícil pero el equipo está en buen camino y vamos a ver al equipo competir y jugar bien», señaló.
El griego destacó que el plantel está muy ilusionado y con ganas de disfrutar de lo logrado en la fase regular, aunque reconoció la dificultad de ganar en Siena. «Es un equipo muy muy duro, un equipo con mucha experiencia europea y va a ser un trabajo muy complicado. Especialmente en su casa son muy fuertes, defienden muy muy bien, es un equipo con muchos veteranos, mucha calidad y el objetivo es competir a tope y buscar nuestras opciones». GARA