Aunque mira la vida desde una comodísima y, en cierta medida, sorprendente sexta plaza, a Osasuna no le ha sentado bien el cambio de año. Tres compromisos ha afrontado ya en 2011 y en ninguno de ellos ha podido celebrar la victoria.

Y eso que dos de ellos se han disputado en El Sadar, bastión en el que los rojillos han acumulado el setenta por ciento de los puntos que les mantienen en posiciones europeas. Pero ni Valencia ni Racing, los dos últimos visitantes del estadio iruindarra, han hincado la rodilla. Castigo divino, quizá, a las cuentas de la lechera que, inevitablemente y pese a las advertencias lanzadas desde el propio equipo, se realizaron en vísperas de esta terna de encuentros en el Sadar. Había quien veía al equipo navarro prácticamente en puestos de Champions y, sin embargo, puede acabar incluso fuera de posiciones europeas.

Porque su próximo visitante no es precisamente una perita en dulce -aunque casi mejor porque el único que se ha llevado los tres puntos en Liga ha sido un Racing al borde del deshaucio-. Más bien al contrario, los hombres de José Luis Mendilibar se van a encontrar un rival al alza. Un Atlético que no conoce la derrota desde la llegada del Cholo Simeone al banquillo -siete puntos en estos tres primeros encuentros del año-, al que ni siquiera le han podido hacer un gol en las cuatro últimas jornadas y que además viene con la moral por las nubes después de que la pasada semana lograra en Anoeta su primera victoria de la temporada a domicilio, con goleada incluida.

Así que no es de extrañar que Álvaro Cejudo augure «un partido difícil». Por la «buena racha del Atlético» pero, sobre todo, «porque tiene jugadores con mucha clase y con muchos galones». «Están en un buen momento», insiste, y además «tienen la motivación de estar con un nuevo entrenador».

Rival difícil, anfitrión complicado

Y hasta ahí. El futbolista cordobés quiere que a la cuarta vaya la vencida y no le cuesta encontrar argumentos para reforzar el objetivo. Así, si el Atlético es «uno de los equipos llamados a estar arriba», Cejudo destaca que «por suerte también estamos peleando con ellos». O si se recuerda que el cuadro colchonero ha acabado los cuatro últimos partidos con su portería inmaculada, rebate que «nosotros también hemos estado varias semanas sin encajar goles y de repente nos han hecho cuatro. Es parte del fútbol».

En la misma línea, Cejudo concede la importancia justa a las virtudes del rival porque lo importante pasa por el propio Osasuna. «No debemos analizarles exhaustivamente. Nos tenemos que fijar en nosotros porque sabemos lo que somos capaces de dar». Más aún teniendo en cuenta que el encuentro se disputa en El Sadar. «Debemos mantener nuestro estilo, sobre todo en nuestra casa, enfocando los partidos como lo hicimos contra el Valencia».

Aunque, a ser posible, con otro marcador porque después de «tres semanas sin ganar, queremos conseguir los tres puntos», subraya el centrocampista, que no se resiste a hablar de un futuro halagüeño. «Si salimos con buena nota de los próximos compromisos, encarrilaremos la parte final de la temporada con ambición». Un mensaje no demasiado habitual en las comparecencias públicas de los rojillos y, por lo visto, también en las privadas. «Es un buen momento para ser ambiciosos, pero en el vestuario no se habla de Europa -explicó Cejudo-. Todo se lleva con mucha normalidad. Ya haremos cuentas cuando tengamos que hacerlas».