Reclaman la soberanía alimentaria para impulsar el sector lácteo vasco
Organizaciones agroganaderas, veterinarios y ecologistas se han unido para impulsar el sector lácteo y reclamar la soberanía alimentaria, al considerar que «está en la cuerda floja»
Juanjo BASTERRA | BILBO
Veterinarios Sin Fronteras, EHNE-Bizkaia y Ekologistak Martxan presentaron ayer en Bilbo, dentro de la campaña «No te comas el Mundo», un amplio estudio sobre el sector lechero vasco, «que se encuentra en la cuerda floja», y llamaron a la sociedad a operar un cambio en los hábitos de consumo para garantizar un modelo de producción y comercialización propio que prime la soberanía alimentaria, no solo en Euskal Herria sino en el resto del planeta.
En los últimos veinte años, según indica el informe, «el abandono de la producción lechera ha sido constante en el Estado español. Han desaparecido el 60% de las granjas y de 70.000 cabezas se ha pasado a 24.500 cabezas de vacuno».
A esto se une, como denunciaron estas organizaciones, que el precio que se pagaba por litro de leche «era de 0,31 euros hace diez años y hoy continúa siendo el mismo». Sin embargo, en ese periodo de tiempo los costes de producción «han aumentado en una media del 109%». En la publicación se constata que el 58% de las granjas lecheras no llega a obtener el salario mínimo interprofesional» y «el 20% no obtiene lo suficiente para cubrir un salario por pequeño que sea, mientras que su sobreendeudamiento continúa incrementándose en todas ellas».
El estudio se resume en un pequeño ejemplar «Ordeñando alternativas» que se va a difundir entre la población. Incluso se ha elaborado un cortometraje que se estrenará el 15 de febrero en Ugao (Bizkaia), que comienza indicando las pocas diferencias que tienen los ganaderos de Karrantza y los de Brasil. Son dos ejemplos con los que se quiere mostrar que el grave problema que sufre el sector primario es común entre los pueblos del mundo, porque «los gobiernos solo se han preocupado de favorecer el negocio de la agroindustria, la gran beneficiada de la situación». Sin embargo, las organizaciones EHNE- Bizkaia, Ekologistak Martxan y Veterinarios Sin Fronteras consideran que es necesario regenerar la «soberanía alimentaria» para que cada comunidad pueda vivir de lo que produce.
También ratifica que las explotaciones vascas son las más dependientes de Europa en la compra de materias primas, especialmente soja, para producir leche y, sin embargo, se encuentran entre las que menos margen económico obtienen. «Carecen de autonomía», explicó Alberto Llona, de EHNE-Bizkaia, pero en torno a ellas «hay un gran negocio por parte de agentes terceros, que es lo que ha motivado esta situación, no solo perjudicial en el ámbito local, sino también para los campesinos de los países empobrecidos, que reciben leche importada a precio `dumping', que hunde sus producciones».
Por ese motivo, Eneko Viñuela, de Veterinarios sin Fronteras, indicó que «es necesario un cambio de modelo productivo, ligado a la tierra, agroecológico, lo más autónomo posible y solidario, algo que las propias personas ganaderas entrevistadas recomiendan a las nuevas generaciones».
El precio que se pagaba a los baserritarras por el litro de leche hace diez años era de 0,31 euros, y «hoy sigue siendo el mismo», pero los costes de producción de esa leche han aumentado en un 109%.