Alcaldes vizcainos se suman a la llamada de Bildu a revisar la política foral de carreteras
Alcaldes de Bildu en Arratia, Busturialdea, Uribe Butroe, Lea-Artibai y Durangaldea solicitaron ayer a la Diputación que «haga una reflexión profunda» sobre la política de movilidad. Pidieron acordar, planificar y revisar criterios e infraestructuras aprobadas en 2011 en Juntas.
Agustín GOIKOETXEA | BILBO
Desde que el 18 de enero el diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, y la titular de Obras Públicas y Transportes, la también jeltzale Itziar Garamendi, anunciasen la paralización total de tres de los ejes radiales contemplados en el Plan Sectorial de Carreteras aprobado en marzo de 2011 y la ejecución parcial de otros dos, Bildu ha calificado las explicaciones dadas al respecto de «insuficientes». Lo hicieron el jueves pasado sus junteros y lo reiteraron ayer alcaldes y ediles de municipios afectados, reiterando que la decisión del PNV ha generado malestar entre la oposición en las Juntas Generales, consistorios y ciudadanía en general.
Llamaron a todos ellos, al igual que al PNV, a «acordar, planificar y revisar» los criterios e infraestructuras acordadas en el Plan Territorial de Carreteras de 2011 y la norma de peajes, al estimar que las actuales «se han demostrado inviables económicamente, muy agresivas con el medio ambiente e ineficaces» para impulsar el transporte público y reducir el número de vehículos por las carreteras.
Pidieron que se vuelvan a replantear los trazados de todos los ejes, escuchando a los municipios «y optando por las soluciones más sostenibles medioambiental y económicamente».
«Efectivamente, el dinero no da para todo, pero en vez de demostrar con humildad y transparencia la situación e intentar consensuar junto con los municipios y los grupos políticos las prioridades y, en su caso, el sistema de financiación, desgraciadamente, una vez más, desde la unilateralidad y la imposición, con un nulo respeto a los ayuntamientos y a la ciudadanía, se ha decidido en base a criterios políticos comenzar la construcción de tres nuevas carreteras». Así lo expusieron Juanjo Nora, teniente alcalde de Atxondo, e Idurre Bideguren, alcaldesa de Bermeo.
Insistieron en que tras la decisión de acometer el eje radial Gerediaga-Elorrio, el túnel de Autzagane y la variante de Bermeo, posponiendo la de Ermua y los viales Urberuaga-Berriatua y Boroa-Igorre, solo hay una decisión política. «No nos han dado más que explicaciones vagas y generales, no justificadas en ningún tipo de informe mínimamente objetivo», apuntaron.
Nora incidió en que el vial Gerediaga-Elorrio -el único que se acometerá por ahora por el sistema de financiación de peaje en sombra- supondrá «un tremendo impacto» en zonas rurales como Gaztelua, en Abadiño, o Atxondo. El teniente alcalde de este municipio auguró que la nueva infraestructura «no va a solucionar nada, la gente seguirá utilizando la carretera actual para ir de Elorrio a Durango».
Su propuesta es mejorar la actual N-636 y, en su caso, plantear una variante «más pequeña» para Abadiño. En el caso del túnel de Autzagane, destacaron que la Diputación se obceca en acometer la galería a pesar de no disponer de un informe ambiental favorable y después de descartar un trazado alternativo paralelo a la línea férrea, que no afectaría a varios caseríos.
Problemas de seguridad
Bideguren resaltó que la variante de Bermeo sigue sin dar solución a la reiterada petición del Consistorio que ella preside para que se construya un nuevo acceso. Asimismo, denunciaron las deficiencias de seguridad «muy graves» en Urberuaga, el tránsito de vehículos pesados por Berriatua y la necesidad de mejoras urgentes en Milloi.
Tampoco se les olvidó explicar que el eje Boroa-Igorre «sacrifica» la única zona rural de Lemoa, con el agravante de que la Diputación no acepta la petición del Ayuntamiento para que se haga un acceso a este pueblo de Arratia. En cuanto al vial Bermeo-Mungia, alertaron del grave problema de seguridad que existe en Larrauri, aunque aclararon que el trazado de la nueva vía va a acarrear serias afecciones a Meñaka y Mungia.
Representantes de Bildu animaron a participar en la manifestación convocada por el Consistorio de Ermua para el sábado, al mediodía, bajo el lema «Ermua, variante y punto». Afirmaron que, «es sin duda, la decisión más grave de las adoptadas por la Diputación vizcaina».
Joseba Gezuraga advirtió de que este proyecto viario estaba contemplado antes incluso que el resto de ejes radiales y se iba a financiar con cargo al presupuesto ordinario destinado a inversiones. Dejó claro que no entra en la dicotomía entre variante de Ermua o de Bermeo, pero apostilló que la primera localidad soporta un «altísimo» volumen de tráfico. A.G.
«Todas estas comarcas necesitan importantes mejoras en el transporte público, sobre todo en el ferroviario, y ha llegado la hora de debatir sobre la necesidad de mantener el peaje en la AP-8», manifestaron.
Bildu insistirá en los contactos con el resto de grupos para que en las Juntas Generales de Bizkaia se constituya una ponencia para revisar el último Plan Territorial de Carreteras y la norma foral de peajes.