La Real afronta el partido de este mediodía en Granada con una tesitura similar a la del jugado con el Sevilla, porque es tal la igualdad que de un resultado va a volver a depender un gran vuelco en la clasificación. Si ganar el lunes permitió avanzar seis puestos hoy perdería bastantes si pierde. El Granada, decimoséptimo, le adelantaría.

Por eso es muy importante ganar al equipo que ahora marca la barrera de la permanencia, ya que lo dejaría a cinco puntos y el average tras una victoria en la primera vuelta que provoca que tampoco sea malo un empate. Claro que la Real ya demostró en el mismo escenario en la Copa que lo suyo no es defender resultados. Debe jugar, sin asumir grandes riesgos, con la idea de ganar a un equipo que ha mejorado con la llegada de Abel Resinos al banquillo, y que se muestra especialmente fuerte en su campo, donde solo ha perdido tres de los once partidos disputados: ante Betis, Barcelona y Rayo Vallecano.

El que fuera portero del Atlético de Madrid ha apostado por un once muy definido, con jugadores muy verticales como sus dos laterales y sus cuatro jugadores más adelantados, aunque ayer tuvo dos contratiempos y no podrá contar hoy por lesión con dos titulares como el extremo Dani Benítez y el medio centro argelino Yebda. Sí recupera al portero Roberto, que ha superado su lesión, al que se espera en la alineación titular.

Montanier también dará continuidad -salvo sorpresa mayúscula- al once que tan buen partido jugó el lunes ante el Sevilla, con el regreso de Griezmann tras superar sus problemas musculares, en detrimento de alguno de los tres delanteros alineados ante los de Míchel.

Xabi Prieto entró en la convocatoria tras recuperarse de la enfermedad que le impidió ir a Zubieta el viernes. Ayer se entrenó con normalidad y habrá que ver si ese contratiempo le deja en el banquillo. Una pena, porque en condiciones normales su titularidad no admitiría dudas por su buen partido del lunes y la tendencia de Montanier de alinearlo en detrimento de Vela fuera de casa cuando se enfrenta a laterales con vocación ofensiva, como Siqueira.

Por si acaso, el técnico convocó a diecinueve jugadores, con la entrada de Ansotegi y De la Bella y la baja de Demidov por lesión. Se sintió mal y se limitó a hacer trabajo de recuperación.

Una fase importante

Con ellos la Real iniciará una fase muy importante con cuatro partidos ante rivales directos como Granada, Mallorca, Athletic y Zaragoza. La realidad es que ahora es tan corta la diferencia que separa a los blanquiazules del resto que esa consideración la merecen todos los equipos de la Liga menos los tres primeros. De los resultados que se obtengan en estas cuatro jornadas va a depender la zona en la que se moverá la Real en el último tercio de Liga.

La experiencia negativa del año pasado, cuando a estas alturas parecía lógico marcarse el objetivo de Europa tras ganar al Mallorca y empatar a puntos con el séptimo que conducía a Europa, y distanciar la zona de descenso en once puntos, demuestra que hasta que no se alcancen los 45 puntos no se pueden marcar más objetivos que el único válido en el fútbol: ganar el siguiente partido. Y ese es el reto para este mediodía.