TITIN III-MERINO II 15

LASA-PEÑAGARIKANO 22

Dicen que cualquier cosa es posible en carnaval y, en un Beotibar alegremente engalanado con las características telas de colores y con marineros, bomberos, mexicanos, payasos y todo tipo de personajes en sus gradas, Kepa Peñagarikano vivió ayer su propia versión del cuento del patito feo. Y es que, el pelotari de Beizama, que en junio estaba buscando una nueva ocupación con la que ganarse el jornal después de no considerar suficiente una oferta de Asegarce por seis meses, se convirtió ayer en el gran protagonista de una de las mayores sorpresas de lo que llevamos de campeonato.

Las circunstancias previas no eran, para nada, las más favorables para el sustituto del sustituto. Su vuelta a la elite se produjo de carambola y enfrente tenían a una pareja que llegaba tras realizar una exhibición ante Martínez de Irujo-Barriola y con una inmejorable oportunidad de colocarse segundos en solitario en la clasificación. Todo ello hacía que los corredores apenas encontrasen a ningún intrépido que cogiera por debajo los 20 a 100 que cantaban, sin demasiado entusiasmo.

El comienzo del partido tampoco fue demasiado esperanzador, con dos fallos de aire de Aritz Lasa y una pasa de saque que dio ligeras ventajas a los favoritos Titín III-Merino II.

El trabajo con Jokin Etxaniz

Sin embargo, en estos momentos de zozobra, un Kepa Peñagarikano que ya había dado síntomas de mejoría en los últimos meses, sacó a relucir su mejor versión de los últimos años. Sin cometer un solo fallo no forzado, el zaguero de Beizama defendió, pero sobre todo gozó con las dos manos, especialmente de zurda, abriendo grandes huecos y dominando en todo momento a Merino II.

Según desveló el propio Peñagarikano al término del partido, desde su pase a Aspe, Jokin Etxaniz lleva meses trabajando con él cómo sacar más provecho a su golpe, cómo dar altura y profundidad a sus pelotazos y Titín III, que no tuvo pelota franca en ningún momento y Merino II, al que le tocó verle la espalda, sufrieron el fruto de ese trabajo específico.

De momento, el partidazo del de Beizama ayer en Tolosa ya ha tenido sus primeras consecuencias, ya que Aspe ya lo ha confirmado para el domino en el Astelena, donde pueden alcanzar en la tabla a Berasaluze-Albisu.

Pero la soberbia actuación de Peñagarikano no hubiera brillado tanto si delante no hubiera estado acompañado por un Aritz Lasa valiente y en forma, que se anotó hasta 11 tantos en juego. En el partido de la primera vuelta, al delantero de Urretxu se le vio cohibido y rehuyendo al cuerpo a cuerpo, todo lo contrario de lo que hizo ayer, a pesar de que el comienzo del partido no fuera el más esperanzador. Como en las últimas semanas, Lasa demostró que le ha cogido la medida al campeonato y que está con juego, haciendo gala además de una amplia gama de recursos.

Por contra, Titín III y Merino II no tuvieron su día y, a partir del empate a seis, se vieron superados en todas las facetas del juego. Adelante, Titín fue mucho menos incisivo que en ocasiones pretéritas y además estuvo inusualmente fallón, sumando hasta cinco errores en ataque. Atrás, David Merino, justo de manos, se limitó a defender, cometiendo también más fallos de lo habitual. Con todo a su favor, fallaron el día menos oportuno y la clasificación se comprimió aún más.

La actividad volverá esta tarde al Beotibar, con el duelo más desequilibrado posible, donde Arretxe-Begino tratarán de imitar a los guipuzcoanos ante los invictos Aimar Olaizola-Beroiz. Eso sí, suceda lo que suceda, los efectos en la clasificación serán mucho más leves de lo ocurrido en el astelehenita de 2012.