GARA > Idatzia > Iritzia> Kolaborazioak

Santi Lorente Activista social

Barcina no fue a Sevilla

En la mesa presidencial, juntos el uno al otro, Basagoiti y Cervera. Las cámaras captaron el momentazo vasco- navarro. Fue entonces cuando me acordé de la presidenta de UPN y de la oportunidad perdida

Decía Diego Cañamero, sindicalista y jornalero andaluz, hace pocos días en una charla en Jerez, que votar al PP o al PSOE era votar a los mismos. La charla, titulada «Hay salida a la crisis», era la antesala de la inminente campaña electoral en la que ya se encuentra Andalucía. Y por ello el PP ha elegido Sevilla para dar extraoficialmente el inicio a la campaña organizando un congreso festivo-extraordinario donde regodearse de su triunfo electoral a nivel estatal y apoyar a su candidato Arenas y de paso hundir más si cabe a un PSOE andaluz herido y desunido.

En la mesa presidencial, juntos el uno al otro, Basagoiti y Cervera. Fue precisamente en ese momento, cuando las cámaras captaron ese momentazo vasco-navarro, cuando me acorde de la Presidenta de UPN y de la oportunidad pérdida.

Barcina no habría roto con el PP, fue el ahora tan pronto olvidado Miguel Sanz quien tomo la decisión de apostar por el PSOE como aliado estratégico para defender la españolidad de Navarra.

Barcina no fue a Sevilla, pero no porque no le habría gustado estar junto a Antonio Basagoiti, sino porque es Presidenta de UPN y el cargo, de momento, obliga.

Pero si Diego Cañamero dice que en Andalucía votar al PP o al PSOE es lo mismo, si en la Comunidad Autónoma Vasca, como se esta viendo en la práctica, es lo mismo, si en Nafarroa ya sabíamos que PP-UPN-PSOE eran lo mismo, ¿porqué UPN no se unifica con el PP o con el PSOE?

Parece ser que su aliado natural en Nafarroa es el PP, por aquello de los intereses de clase, pero los intereses de Estado en este caso son interclasistas, como el PNV, y por lo tanto la defensa de España prima por encima de los intereses de partido, aunque con este PSOE no les sea difícil mantener al unísono los mismos, ya que en Nafarroa el PSN es un mero acompañante tanto en el Gobierno como en la oposición.

¿A que espera entonces UPN para abrazar pública y abiertamente la casa común de la derechona española? Sin lugar a dudas, a que la correlación de fuerzas políticas navarras suponga que el PSN no puede ejercer de árbitro en la elección del Gobierno Foral.

Esto significa, ni más menos, que mientras el PSN siga ejerciendo de árbitro, seguirá gobernando la derecha en Navarra y, por lo tanto, quienes esperan un giro a la izquierda o incluso a posiciones «vasquistas» por parte del PSN pueden llegar a desesperar.

Es hora, por lo tanto, de articular una nueva alternativa para el cambio en Nafarroa, no basada únicamente en las claves electorales, sino también en la unidad en la lucha social, en el trabajo coordinado con los movimientos populares y organismos sociales.

El mejor camino para lograr el cambio político en Nafarroa en 2015 es organizar, trabajar, consensuar, dinamizar y luchar desde ya, por, para y desde la unidad de los sectores progresistas y de izquierdas, separando el polvo de la paja, sabiendo discernir qué es lo que importa y prioritario para la mayoría social obrera y capas populares y poniendo en su sitio aquellas cuestiones, sin olvidarlas por supuesto, que pueden llevar otros ritmos.

Sin la unidad navarra de izquierdas y sectores progresistas, sindicalismo activo y consecuente, movimientos sociales y populares, y sin una dinamización, coordinación y complicidad absoluta para la lucha social de toda esta amplia y plural representación popular, no será posible descartar una vez más al PSN como árbitro en la elección del Gobierno Foral del año 2015.

Pero no hace falta esperar tanto. Si no se articulan urgentemente dinámicas incluyentes en todo este espacio social navarro, el huracán depredador que lleva en su seno la crisis del capitalismo arrastrará a posiciones cada vez más impermeables a amplios sectores de la ciudadanía que esperan y necesitan una alternativa, no solo para llegar a conseguir el cambio de modelo y de gobierno, sino también para la pelea y la lucha social, popular y democrática para dar una salida a la crisis y caminar a un escenario antagónico al actual.

Y eso será el socialismo del siglo XXI.

Imprimatu 
Gehitu artikuloa: Delicious Zabaldu
Igo