NUEVO DISCO DEL GRUPO TXANTREANO
¿A qué suena Barricada cuando no está El Drogas?
El nuevo disco de Barricada genera expectación. La banda ha de demostrar que sigue en pie después de la marcha de El Drogas. Y se ha puesto manos a la obra. El resultado son trece temas que sonarán en breve y se defenderán en directo. El grupo tiene un nuevo bajo, pero no sustituto a la voz.
Aritz INTXUSTA
Ya no es cosa de los músicos. No se trata de adivinar cuántos va a cumplir El Boni. Hasta las primeras canciones de Barricada están perdiendo ya su juventud. El primer disco, al igual que el grupo, está a punto de cumplir la treintena. Pero aún quedan ganas de furgoneta y rock escondido en las cuerdas de sus guitarras. Ayer, Alfredo Piedrafita, Ibi y el Boni dejaron a varios medios -entre ellos a GARA- asomarse a los trece temas que compondrán su nuevo disco, que saldrá del horno el próximo día 17 de abril. Por el momento, el nuevo trabajo de Barricada aún no tiene nombre o, al menos, se mantiene en secreto.
Un disco de Barricada siempre genera cierta expectación, pero este, quizá, sea el que más. Varias circunstancias hacen de este trabajo sin nombre algo muy especial. La primera de ellas es la celebración de los primeros treinta años, pero quizá sea la que menos importe. No es un momento de echar cohetes para la formación, pues tienen un doble reto complicado de afrontar. El nudo gordiano está en la marcha de la formación de Enrique Villarreal, El Drogas, letrista, bajo y voz de Barricada, además del rostro más conocido de la formación, quien ahora continúa con su carrera musical dentro de Txarrena. Por otro lado, Barricada viene de haber ejecutado un trabajo excepcional, «La tierra está sorda», centrado en la represión y el dolor que dejó el golpe de Estado del 36. «La tierra está sorda» mereció los mejores halagos de los críticos, de los fans, de los represaliados... Fue, en definitiva, un disco soberbio. Después de algo así, ¿cuál es el siguente reto? ¿qué sonido tendrán? ¿quién cantará? La respuesta es sencilla: suena a Barricada, a su rock de siempre, y canta el Boni, como ya lo hacía más o menos en la mitad de las canciones. El grupo ha incorporado como bajo para su nuevo disco y la consiguiente gira a Ander Izeta. Al menos por el momento, Izeta no es una cuarta pata. El camino de El Drogas y sus compañeros se ha separado, pero «esta ha sido su casa y no se ha cerrado ninguna puerta». Pero Barricada no espera y tampoco se ve cómoda hablando del futuro. En el fondo, los rockeros siempre viven en presente.
Tanto Izeta como Ibi, el batería con sambenito de novato pese a llevar once años con Barricada, son «del Oeste» o, lo que es lo mismo, guipuzcoanos. Sin embargo, ni Alfredo Piedrafita ni el Boni aceptan que se cuestione la denominación de origen del grupo. Barricada es, siempre ha sido y será, un grupo de la Txantrea o, mejor dicho, de aquel barrio conflictivo que les vio nacer. Por otro lado, el zarauztarra es un bajista con espíritu de manitas. Además de músico es lutier -elabora su instrumento con sus propias manos- así que merecerá la pena echar un vistazo al escenario para ver con qué sale. Uno de los bajos de Izeta tiene el clavijero con un saliente en forma de abrebotellas y El Boni no descarta abrirse una cerveza en medio del concierto, ya que tendrá ese mástil bien a mano.
Un aperitivo del nuevo trabajo
Salvo en un par de temas de los trece que tendrá el nuevo disco, será la voz del Boni la que guíe de nuevo a los fans a adentrarse en los temas. Las trece canciones, como es de costumbre, son muy de cantar. La garganta cascada del veterano guitarra suena al arrullo de siempre, ese que invita a ser recitado como un mantra mientras se cabecea acodado en la barra con un vaso en la mano. Algunos temas del nuevo disco -como el «Pa enredarte», «Aguardiente» o «El muelle»- tienen cierto toque a álbumes como «Por Instinto». Sin embargo, «hay un poco de todos los palos», explica Alfredo Piedrafita. Destacan de entre las canciones la balada de aire introspectivo «Eclipse» y la melancólica «Imán» que aparece en el álbum en acústico. El disco se completa con dos temas en los que canta el propio Piedrafita, que se han bautizado como «El invierno» y «La balanza». Esta última canción tiene letra de Kutxi, voz y letra de Marea, que en el trabajo que verá la luz en breve canta una de las estrofas. En «Remiendos» la colaboración es de Iker Piedrafita (líder de Dikers y el encargado de la producción).
Probablemente, sea el final del disco con la vacilona «Rugir y morder» y -sobre todo- «Flechas cardinales» lo que mejor sabor de boca deja cuando se escucha por primera vez. Pese a ello, el grupo apuesta por «Punto de mira» como single y, en pocos días, empezará a rodarse el videoclip. Está previsto que en las radios comience a escucharse este tema a partir de la semana que viene «en las pocas radios que siguen poniendo algo de rock», explica Piedrafita. La letra de «Punto de mira» aborda temas clásicos del grupo txantreano, inconformismo, críticas al control policial con cierto aire pacifista, pero animando a la resistencia.
Precisamente en las letras estaba una de las mayores dificultades a las que se enfrentaba esta nueva Barricada convertida en terceto. «No miedo, igual sí preocupación. El Drogas cuidadaba mucho las letras, era muy narrativo. Siempre les hemos dado mucha importancia», comenta el Boni. Sin embargo, para su nuevo disco apenas ha habido discusiones y los nuevos temas salieron muy rápido. «Alfredo y yo hemos agarrado el toro por los cuernos. Nos decíamos: `tengo una canción, ponle letra'. Eso luego se traslada al grupo y se redondea en el local de ensayo», confiesa el Boni. «Nos hemos quitado los complejos por el momento que estábamos viviendo en el grupo y no le hemos dado muchas vueltas. Las canciones suenan frescas y son directas», continúa.
Por su parte, Ibi asegura que se trata de temas que les han surgido «de dentro» a los miembros del grupo. «No piensas en nadie cuando trabajas una canción. Lo fundamental es que te llene a ti mismo. Al componer, hace falta que cada uno se crea lo que cuenta», dice el batería. Para Ibi, el nuevo disco va a nacer porque «nosotros nos seguimos creyendo nuestra propia historia».
Uno de los fuertes de Barricada ha sido siempre el directo. Para ello cuentan con dos argumentos de peso: un público que se sabe hasta la última coma de cada tema y un «cajón lleno de canciones» del que se pueden sacar auténticos himnos del rock and roll. El grupo es consciente que, en la nueva gira, podrán tocar seis o siete canciones porque el público les demanda que tiren de fondo de armario y les haga vibrar con temas de siempre. Probablemente sea ahí, donde más se note la ausencia de El Drogas. «En directo ahora tiraremos de canciones del Boni, tiraremos de clásicos de canciones que antes cantaba El Drogas, pero que nos hemos visto cómodos cantándolas alguno de nosotros. Pero, también hay que decir que hay algunos temas, muy personales de él, que será difícil que las volvamos a tocar», confiesa Alfredo Piedrafita. «Pero tenemos muchísimas canciones para buscar. No cabe duda de que un concierto de Barricada, seguirá siendo un concierto de clásicos», se explica.
El Boni le ve también un lado positivo a esta necesidad de rebuscar en ese baúl de los recuerdos. «Podemos jugar con canciones que a la gente le gustan y no están en el repertorio habitual. Parece que ya no las ibas a tocar nunca. Vamos a sorprender».
Asimismo, Barricada dice que en sus conciertos también canta el público y que quizá haya canciones que tengan que cantar ellos. A.I.