La victoria sobre el Granada deja a los rojillos en una posición inmejorable para repetir presencia en la élite e incluso, si se mantiene el ritmo, optar a algún puesto europeo de aquí a lo que resta de campeonato.

Pero la felicidad no pudo ser completa. Ahora que por fin Osasuna había encontrado dos hombres en ataque con presencia rematadora y acierto, va a tener que prescindir de ellos durante las próximas semanas y habrá que ver hasta qué punto ello merma las posibilidades de la escuadra navarra.

Fruto de un golpe, Lekic sufre una rotura del tercio proximal del cúbito derecho -hoy será definitivo- que le mantendrá apartado de los terrenos de juego por espacio de mes y medio o dos meses, e Ibrahima -también pendiente de confirmación- padece una posible rotura muscular, por lo que será baja.